Las capturas de los tres salvadoreños registrada el 26 de agosto, es solo parte del hostigamiento al que son sometidos en la zona limítrofe y que se ha mantenido de esa manera desde 1992.
Sobre eso, Rosa Silvia Yáñez, manifestó que ya les habían advertido que no les dejarían utilizar sus tierras y que en ningún momento respetarían la Convención acordada en el Fallo de la Corte Internacional.
“Llegaron 300 hombres entre militares, policías y los capturaron manifestando que esas tierras ya pertenecían a Opatoro y que para ellos no existía la Convención y tampoco respetarían los tratados internacionales, les cortaron los alambres, les llevaron los que iban a cambiar y todo lo que no podían quitar de los terrenos, lo dejaron cortados”, asegura.
Agregó que provocaron daños en los alambrados, mismos en los que los salvadoreños habían invertido 900 dólares, más el pago de trabajadores para colocarlos. A los privados de libertad los tuvieron todo el día y fueron llevados al paso fronterizo conocido como El Mono, además de calificarlos de usurpadores.
“Con esto han llegado a una situación crítica para nuestra comunidad y esperamos que nuestro gobierno a través de la Comisión Binacional, haga algo al respecto, porque ellos ya tienen conocimiento, no podemos permitir que ellos no respeten y nos quieran quitar lo que nos pertenece”, agregó Yánez.
El problema ya es del conocimiento de las autoridades salvadoreñas, al menos de las legislativas.
Jorge Escobar, diputado de Arena por el departamento de La Unión, indicó que los pobladores de Cerros de Peña están siendo afectados por la alcaldesa de Opatoro, Honduras, que les están quitando los terrenos que les pertenecen.
Por su parte, el diputado Edgar Escolán, secretario de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Asamblea Legislativa de El Salvador, dijo que se había comunicado con el presidente de la Comisión Binacional, Everardo Chicas, para hacerle del conocimiento que tenían problemas con las personas del ex bolsón y la Fuerza Militar de Honduras.
Se trató de obtener la versión del Ministerio de Relaciones Exteriores de El Salvador, con el encargado de comunicaciones, quien se comprometió a brindarla. Al cierre de la nota no había respuesta.