??xodo de familia tras doble homicidio

Dueño de taller y empleado fueron asesinados en San Luis Talpa, La Paz

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Reynaldo Henríquez, de 60 años, y su ayudante Ricardo Chávez, de 48, fue asesinado en la lotificación Flores de La Paz.

/ Foto Por Salomón Vásquez

Por Diana Escalante

2015-10-22 6:55:00

El drama para una familia empezó con el asesinato de uno de sus miembros y  el empleado de este, en el cantón La Cuchilla, de San Luis Talpa, en La Paz.  

El jueves a mediodía, después de que Medicina Legal se llevó los cadáveres de la escena, los dolientes subieron algunos electrodomésticos y aves de corral a dos vehículos y se marcharon  a toda prisa escoltados por la Policía.

Reynaldo Henríquez Vásquez, de 60 años, tenía cerca de dos  años de haber instalado el negocio en la lotificación Flores de La Paz y había contratado a Ricardo Chávez Domínguez, de 48.

Ambos  hombres fueron encontrados brutalmente asesinados dentro del inmueble, en medio de las refrigeradoras que reparaban. 

La Policía sospecha que los mataron pasadas las 8:00 de la noche del miércoles, porque a esa hora los pobladores oyeron varios disparos pero por temor no salieron a la calle a ver qué pasaba. 

Fuentes policiales relataron que la zona donde fue el ataque es asediada por la mara Salvatrucha y que anteriormente Henríquez tenía el negocio en el cantón Comalapa, a un kilómetro de distancia, en un sector donde delinque la pandilla 18.

 Las primeras averiguaciones de la Policía apuntan a que integrantes de la mara Salvatrucha habrían asesinado a los hombres porque creían que eran informantes de los delincuentes rivales.

“La consigna en este lugar es: ver, oír y callar. Los mareros los habrían matado porque creían que se habían trasladado para acá para estar llevando y trayendo información a los otros pandilleros”, señaló un agente que custodiaba la escena.

Mientras subía algunas pertenencias y apuraba a varias mujeres que trataban de meter las gallinas en una jaula, una pariente de Henríquez contó que él vivía solo en el taller  y su familia lo llegaba a visitar desde otro municipio.

Según la mujer, además de reparar electrodomésticos en el taller y a domicilio, Henríquez se dedicaba a la crianza de gallinas y chompipes.

La mujer no reveló si la víctima ya había sido amenazada, pero admitió que la zona era peligrosa y se marchaban por temor a un nuevo ataque.

Cuatro homicidios en cinco días
A los asesinatos de Henríquez y Chávez les precedieron los de otros dos hombres. 

A uno lo mataron el domingo 18 de octubre y al otro dos días después.

Algunos pobladores aseguraron que la mara Salvatrucha y la pandilla 18 han agudizado sus ataques en San Luis Talpa y en los municipios de  Tapalhuaca y San Pedro Masahuat,  con los que limita.

Las fuentes aseguraron que por disputarse territorios los delincuentes se están llevando de encuentro a personas que no tienen ningún vínculo con grupos criminales.

“El martes mataron a un joven de 19 años que no andaba en nada, lo fregaron solo por negarse a ser colaborador de la mara”, dijo un poblador.

Una muestra del temor que están provocando los pandilleros en la lotificación Flores de La Paz y sus alrededores es que en los muros de algunas viviendas y de la escuela se lee: “muerte a los soplones”.

Este acoso de las pandillas, según los denunciantes, ya provocó que algunas familias que tenían varios años de residir en la zona,  salieran huyendo. 

Los lugareños temen que el problema empeore porque la presencia policial es mínima y eso ha permitido que los delincuentes tomen el control.