Chicas teme que Acuerdo de Ataco cause división en el FMLN y en ARENA

El vocero del gobierno y dirigente efemelenista dice que en el FMLN no ven bien que se entiendan con ARENA para tratar temas de país

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Eugenio Chicas, Secretario de Comunicaciones. / Foto Por Archivo

Por Magdalena Reyes/Eugenia Velásquez

2015-09-08 10:02:00

El secretario de comunicaciones de Casa Presidencial, Eugenio Chicas, teme que los recientes acuerdos logrados en Ataco, en el seno de la mesa interpartidaria, puedan causar división y fricción tanto dentro del FMLN como en ARENA. 

La preocupación de Chicas parte de que en la encerrona que realizaron dirigentes de los partidos políticos el pasado 26 y 27 de agosto en un hotel de Ataco, las fuerzas políticas mayoritarias llegaron a varios entendimientos clave.

Uno de ellos fue trabajar unidos por un mismo objetivo: la seguridad en el país. Fueron 10 puntos en los que convergieron los políticos tanto de ARENA y FMLN como de los otros partidos que participaron.

Auspiciados por la OEA (Organización de Estados Americanos) y ONU (Organización de Naciones Unidas), los políticos se sentaron a debatir sus iniciativas.

De ese diálogo surgieron propuestas como hacer consultas a la Corte Suprema de Justicia (CSJ) para establecer “jueces sin rostro”, así como la creación de un instituto de criminalística, entre otros puntos. También acordaron evitar la confrontación política, sobre todo entre areneros y efemelenistas. 

Chicas valoró que las fuerzas políticas antagónicas, desde el punto de vista político e ideológico, tengan la capacidad de coincidir y de establecer un interés superior, como por ejemplo, enfrentar la criminalidad que agobia al país.

Aunque Chicas considera que esos acuerdos son un logro entre la izquierda y la derecha en el período de post conflicto, plantea un escollo: que estos acuerdos puedan, eventualmente, generar desaveniencias internas en ambos partidos.

“Esas desaveniencias (serían) en la esfera de la estrategia que puede estar desarrollando un partido opositor, dentro de ARENA, (por) la subscripción del Acuerdo de Ataco”, afirmó Chicas ayer durante una entrevista televisiva.

El vocero del gobierno cree que pueden haber dos corrientes: la que está de acuerdo con construir un pacto de nación como el que surgió en Ataco, para enfrentar la inseguridad, y la otra que hace cálculos electorales y que podrían pensar que le estarían haciendo un favor al partido de Gobierno.

Y acotó: “Yo diría también que dentro de la izquierda es probable que haya gente que no vea con buenos ojos que nos entendamos con ARENA; me atrevería a decir que no ven bien que tengamos la capacidad de entendernos con quienes nos quieren desestabilizar”.

Pero Alberto Romero, jefe de fracción de ARENA, negó que haya desaveniencias internas, pero le resultó “novedoso” conocer, de boca del Secretario Presidencial y también dirigente del FMLN, que elpartido oficial está dividido.

Recrimina a EE. UU. por las deportaciones 

En la misma entrevista, Chicas también recrimimó a Estados Unidos por las deportaciones que realiza desde 1996 y aseguró que eso ha incrementado la inseguridad en El Salvador, debido al surgimiento de las pandillas.

“En el año 96 Estados Unidos decide excarcelar a criminales que tenía encarcelados y eso nos los empiezan a deportar sin decir agua va, incluso en un periodo estas personas venían sin una ficha criminal que pudiera darnos una idea de a quienes estábamos recibiendo”, dijo Chicas.

El funcionario indicó que el país exportó “personas humildes” que tuvieron su escuela en las calles de Los Ángeles, California, donde nacieron las pandillas.

Pero el vocero del gobierno no se quedó hasta allí, sino que afirmó que Estados Unidos tuvo una enorme responsabilidad en el incremento de los índices de criminalidad en el país. “Ellos comenzaron a deportar a personas que habían delinquido en Estados Unidos, lejos de ser procesados allá lo que hacían era ponerlos en un avión y mandarlos a El Salvador”, reprochó.

Y añadió que esa medida le permitió a Estados Unidos mantener una economía próspera, pero a El Salvador le generó un enorme problema.

“Es cierto, son nuestros compatriotas pero habiendo tenido ya la presunción de que había cometido un delito, lo idóneo es que los procesaran allá, pero las autoridades de esa época decidieron otra cosa y las deportaciones fueron creciendo y creciendo”, acotó Chicas.