La huella indeleble de Don Bosco

 En El Salvador hay estructuras salesianas que han marcado la historia educativa tanto en la capital como en el interior del país

descripción de la imagen

Los salesianos llegaron a El Salvador en 1897 y desde esa fecha iniciaron con su misión con los jóvenes. Les presentamos algunas de sus más representativas obras en el país.

/ Foto Por elsalv

Por Nidia María Hernández

2015-08-14 4:15:00

San Juan Bosco siempre creyó   que para cambiar la vida de las personas, se debe dejar una  huella. El enfoque de este reportaje es precisamente dar a conocer algunas de las tantas huellas plasmadas en edificios y obras salesianas en el país.

Los salesianos llegaron a El Salvador en 1897. Desde esa fecha iniciaron su misión con los jóvenes, tanto que dos años después fundaron el Colegio Santa Cecilia, aunque empezó como un espacio para impartir  talleres.

El 8 de diciembre de 1987 empieza a funcionar el Polígono Industrial Don Bosco en medio de cinco comunidades de escasos recursos. La estructura es de 14 manzanas propicia para enfocarse en potenciar el tema académico, talleres, empresas y el arte.

En 1953   se fundó el Instituto Técnico Ricaldone, el cual a la fecha cuenta con seis especialidades y el tercer ciclo.

A través de dichas obras, los salesianos han beneficiado a miles de salvadoreños.