Proteger y asistir a los niños y adolescentes que son víctimas de la violencia. Esa es una de las demandas hechas ayer al gobierno y a las alcaldías por parte de la Mesa Permanente de Niñez, Adolescencia y Juventudes.
Integrantes de la Mesa señalaron que 17,478 estudiantes desertaron de las escuelas durante 2014 “como única medida” para salvaguardar sus vidas. Esto según datos del Observatorio 2014 del Mined.
La Mesa está integrada por las ong: Plan Internacional, Aldeas Infantiles SOS, Ayuda en Acción, Save the Children, Educo. Las cuales son acompañadas por la PDDH.
Los demandantes expresaron su preocupación por “el desplazamiento forzado al que se ven sometidos los grupos familiares que incluyen a niñas, niños y adolescentes, situación que genera consecuencias psicológicas graves para la niñez, desarraigo social, así como angustia, sin que tengan una respuesta del Estado ante la mencionada problemática”.
El procurador de Derechos Humanos, David Morales, afirmó al respecto que “el Estado no ha construido una respuesta concreta y efectiva ante este fenómeno”. Además, reconoció que “las víctimas están desprotegidas por el Estado”.
Nelson Flores, de Fespad, señaló lo grave que es el desplazamiento forzado en el país y que este es generado por diferentes tipos de violencia.