En The Huffinton Post: Tregua en El Salvador fortaleció a las pandillas

El articulista estadounidense critica que el Gobierno de Mauricio Funes en 2012 hizo “pacto con el diablo”

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En 2013 se encontraron 4 cuerpos de estudiantes enterrados en Las Colinas, de Santa Tecla.

/ Foto Por Archivo

Por Eugenia Velásquez

2015-07-26 9:00:00

“Si usted hace un pacto con el diablo, el diablo esperará mucho a cambio…”.

“Es exactamente que el antiguo Presidente izquierdista Mauricio Funes de El Salvador hizo en 2012 con su partido Frente Farabuno Martí de Liberación Nacional  (FMLN), y la Mara Salvatrucha 13 (MS-13) y la 18a Calle, o la pandilla Barrio 18 – tanto creado en Los Angeles, como responsable de muchos asesinatos y mucha angustia aquí y en todas partes de los Estados Unidos…”.

Así inicia  el artículo publicado ayer en el periódico estadounidense The Huffinton Post, en donde habla de como las pandillas han evolucionado en El Salvador y de que la tregua, si bien redujo en su momento los homicidios a cambio de beneficios para los pandilleros, al ya no contar con ellos, las muertes se elevaron con cifras más altas que cuando la guerra de los 80.

“Funes fue presidente entre 2009 y 2014. Sí, él y algunos de sus altos mandos militares y la Iglesia Católica negociaron una tregua entre miembros de pandillas MS-13 y 18 de la calle en 2012. Pero al parecer no tuvo en cuenta lo que es una cosa muy importante con lo que esos demonios particulares podrían traer”, reflexiona.

“Después de que el FMLN hizo este pacto, que vio líderes de pandillas que acuerdan dejar de asesinar a la gente a cambio de mejores condiciones carcelarias, incluyendo traslados y visitas familiares, los asesinatos disminuyeron”, dice la publicación firmada por Randy Jurado Ertll.

Sin embargo, compara que pese a esta caída en los homicidios, que pasó de un promedio de 14 muertes por día a tan sólo cinco durante más de 16 meses, para las personas que residen en las zonas controladas por los pandilleros la tregua tuvo un “efecto inesperado”, ya que permitió a las bandas criminales “aprovecharse de los ciudadanos todos los días a través de la extorsión y el terror”.

Cita a la agencia The Associated Press de revelar que “los números de homicidios comenzaron a subir de nuevo en junio de 2013 y nunca regresó hacia abajo.”

Es más, de acuerdo con las estadísticas que maneja la Fiscalía General de la República (FGR), abril, mayo y junio han sido de los  meses más violentos en el país, estos dos últimos han registrado un récord elevado de muertes, incluso, mayores desde que se firmaron los Acuerdos de Paz.

Según las cifras de la Fiscalía, abril cerró con 385 muertes;   en mayo se contabilizaron 635; y en junio ocurrieron 650 homicidios, volviéndolo el mes más sangriento del país en décadas.

El articulista se basa en información publicada por la agencia AP con base en datos proporcionados por la Policía Nacional Civil (PNC), y explica anclado en esos números, “que en junio más de 677 personas fueron asesinadas, más que cualquier otro solo mes desde la guerra civil del país que terminó en 1992, que asciende a un promedio de 22,6 homicidios por día”.

Los salvadoreños que han sido nacionalizados como ciudadanos estadounidenses tampoco se han librado del alto índice de criminalidad que reina en el país.

“Más de 35 ciudadanos estadounidenses han sido asesinados en los últimos años. La mayoría eran salvadoreños que se convirtieron en ciudadanos naturalizados estadounidenses y devuelto como turistas…”, expresa.

El articulista también describe la forma como las pandillas trataban de ocultar las muertes a través de los “cementerios clandestinos”, lugares que empezaron a proliferar tras la tregua en 2012 durante el gobierno Funes.