Destruyen 8 millones de cigarros ilegales

Los cigarrillos fueron introducido por los contrabandistas y procedían de China, Paraguay y Belice.

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Parte del cargamento millonario de cigarrillos destruidos en una planta procesadora de basura en Nejapa. Foto EDH

Por David Marroquín sucesos@eldiariodehoy.com

2015-06-04 7:00:00

Más de ocho millones de cigarrillos que habían sido introducidos de contrabando al país fueron destruidos por las autoridades.

El producto decomisado en distintos procedimientos estaba valorado en más de 500 mil dólares, pero además de eso, el fisco dejó de percibir unos 10 millones de dólares en impuestos por el ingreso ilegal de esa cantidad de cigarros.

Este producto estaba almacenado en 800 cajas de 50 paquetes cada caja. Cada una de las cajas tenía un valor promedio de 600 dólares.

La destrucción se realizó en las instalaciones de una empresa procesadora de basura situada en el kilómetro 27 de la carretera Nejapa-Quezaltepeque.

Los más de ocho millones de cigarrillos destruidos es el resultado de decenas de decomisos que se hicieron en distintos negocios, bodegas, vehículos y a personas que trataban de pasar a pie por los puestos fronterizos con los cargamentos del referido producto.

La mayoría de los cargamentos de cigarrillos ha sido introducida al país por los contrabandistas, a través de puntos ciegos fronterizos con Honduras, según fuentes policiales.

Este tipo de cigarrillos procede de China, Paraguay y Belice, ya sea por vía marítima y terrestre, según la Policía,

Representantes de las empresas distribuidoras de cigarrillos han señalado anteriormente que este tipo de producto que ingresa de forma ilegal al país no reúne los requisitos sanitarios mínimos, además de los que exigen las leyes salvadoreñas, entre éstas las medidas de salubridad.

Al entrar este tipo de producto de forma ilegal al país, se viola la Ley especial para Sancionar Infracciones Aduaneras y la Ley para el Control del Tabaco, en la cual se establece que pictogramas en las etiquetas de las cajetillas, precio de venta, y la leyenda de advertencia sanitaria, entre otros, según las autoridades.

Investigaciones de la Policía descubrieron que el cigarro de contrabando ha acaparado un 15 por ciento del mercado salvadoreño, debido a que se vende a precios más bajos de los que son distribuidos legalmente por las empresas autorizadas.

La Asociación Salvadoreña de Distribuidores de El Salvador (ADES) advierte a los comerciantes de abstenerse de no comercializar cigarrillos de contrabando, porque no cumplen con las medidas sanitarias ni de calidad, tampoco poseen ningún control para su venta, y además de ser de dudosa procedencia.

La legislación penal sanciona de seis a ocho años de prisión a las personas que distribuyan o comercialicen productos de contrabando o ilegales.