Lázaro Usiel Vásquez Del Cid es un convicto que en 2006 fue condenado a 16 años de cárcel por los delitos de robo agravado, agrupaciones ilícitas y homicidio tentado.
Hasta el martes pasado, el sujeto estuvo burlando a las autoridades penitenciarias valiéndose de que estaba en la fase de confianza y se le permitían salir durante 12 horas del penal La Esperanza (conocido como Mariona).
Lo que desconocían era que él usaba ese tiempo fuera de la cárcel para buscar jóvenes a quienes presuntamente privaba de libertad y luego abusaba sexualmente de ellas.
Claudia Trigueros, jefa de la Unidad de delitos relativos a la Niñez y la Mujer de la Fiscalía, sostuvo que, desde mayo pasado, el agresor frecuentaba las paradas de buses de los alrededores del parque Infantil y la alcaldía de San Salvador para escoger a sus víctimas.
Las investigaciones señalan que Vásquez se acercaba a las mujeres, las abrazaba, las amenazaba y fingía ser pareja de ellas para no levantar sospechas entre la gente.
Después, el convicto a punta de pistola llevaba a las jóvenes a un hospedaje donde las violaba y, para justificar su comportamiento, les decía que las exparejas de ellas lo habían enviado a ultrajarlas.
“Cuando tenía a las víctimas en el lugar donde las estaba abusando, les quitaba sus teléfonos y les devolvía el chip. Esto era una forma de tenerlas sometidas con la intención de volverlas a ver…”, señaló Trigueros.
La Fiscalía ha recibido cuatro denuncias de jóvenes cuyas edades oscilan entre los 18 y 23 años. Las características físicas del agresor que las víctimas han brindado coinciden con Vásquez.
El sujeto fue capturado el martes, a las 6:30 p.m., cuando iba a entrar al centro penal para cumplir con el acuerdo. Las autoridades no descartan que haya más víctimas, a quienes piden que se acerquen a denunciarlo.