El menor Jonathan Adolfo fue condenado a 15 años de internamiento por el homicidio del campeón e instructor de fisicoculturismo y agente antimotín Johnny Stanley Rivas Martínez.
El sujeto fue detenido cuatro meses después del hecho, otros cuatro implicados también habían sido capturados antes por la Policía.
Disparos en el cantón Palo Grande, en Colón, alertaron a las autoridades y al movilizarse al lugar, ubicaron a Jonathan junto a otros más quienes fueron capturados.
Ayer un Juzgado de Menores encontró suficientes pruebas para incriminarlo e imponerle la pena máxima a un menor.
El asesinato del campeón de fisicoculturismo ocurrió la tarde del 11 de octubre de 2014 en la colonia San José II, en Lourdes, La Libertad, en momento que reparaba el techo de su casa. Varios sujetos incluyendo a Jonathan Adolfo, llegaron a su casa y le dispararon a quemarropa.
Un familiar de Rivas Martínez dijo haber escuchado varios disparos y al salir a ver lo sucedido, se encontró con la triste sorpresa.
El atleta sufrió un disparo en el hombro y aún con vida fue llevado a un hospital del Seguro Social.
Sin embargo, al llegar al hospital del Seguro Social, se quejó su familia que no lo querían atender porque no llevaba el Documento Único de Identidad (DUI).
Testigos del hecho manifestaron que el agente Rivas Martínez, en su intento por repeler a sus atacantes, lesionó a uno de ellos.
Investigaciones revelaron que un cabecilla de pandillas recluido en el penal de Izalco habría dado la orden de matarlo en venganza por participar en su captura. Rivas Martínez fue ultimado en una racha de asesinatos, ya que la semana de su muerte habían asesinado a cuatro agentes más.
En 2014 asesinaron a 39 policías y este año ya van 24.