Escuelas aún sin los fondos para funcionar

El Simeduco advierte que Educación no les ha desembolsado dinero para funcionamiento

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La asignación tardía de presupuesto para funcionamiento mantiene a los centros educativos con problemas para solventar necesidades de material y reparar equipos. Foto EDH / archivo

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2015-05-25 8:00:00

Muchos de los centros educativos públicos de enseñanza básica que pertenecieron al Programa Educación con Participación de la Comunidad (Educo) no han recibido fondos para cancelar salarios a sus empleados administrativos, ni los recursos que requieren para funcionar, informó ayer Francisco Zelada, secretario general de la gremial docente Simeduco.

Zelada expuso que de acuerdo con un sondeo que han realizado entre las 2,232 instituciones Educo, que pasaron a formar parte del sistema regular, siguen afectadas por el retraso en la entrega de fondos.

Sin embargo, semanas atrás el ministro de Educación, Carlos Mauricio Canjura, aseveró que esa cartera de Estado ya había empezado a desembolsar dinero a los centros educativos públicos.

Con el dinero para funcionamiento las instituciones tienen que comprar material que los docentes necesitan para trabajar con los estudiantes, insumos para la limpieza, hacer reparaciones a las instalaciones y equipos, pagar algunas cuentas como agua, telefonía e internet, entre otros.

Según lo externado, algunos solo han recibido para cancelar personal administrativo y paquete escolar.

Lo ideal, en palabras de Zelada, es que el gobierno, a través del Ministerio de Educación (Mined), les depositara los fondos al comenzar el año.

“Los últimos dos gobiernos de derecha entregaban los fondos en marzo, a más tardar en junio. Los dos gobiernos de izquierda lo han estado dando cuando el año está terminando, en octubre, en noviembre, ya que han afectado la calidad”, advirtió el sindicalista.

Sostiene que como los fondos que el gobierno entrega a las escuelas son muy poco, el siguiente año lo empiezan en las mismas condiciones de precariedad.

“Es un círculo vicioso. Y además, cuando los directores solicitan material fiado a las librerías se los dan más caro”, agregó el secretario general del Simeduco.

Daniel Rodríguez, director del centro escolar Cantón El Cedro, de Panchimalco, San Salvador, explicó que el 6 de mayo pasado les depositaron dinero nada más para pagar al personal administrativo que labora en esa institución y para pagar los útiles escolares.

Rodríguez declaró que en su caso no solo lo ocupa para adquirir el material didáctico, el módem de internet, pagar las cuentas, sino también para pagar de allí al instructor de la banda de paz y a las madres que preparan los alimentos.

De acuerdo con lo externado por el educador, “es increíble que quieran hacer que los centros escolares funcionen sin presupuesto. Solo en el ramo de Educación se da este fenómeno. A partir del gobierno de Mauricio Funes, las escuelas prácticamente todo el año hemos funcionado sin presupuesto”.

Rodríguez dijo que cada año se ven forzados a pedir fiado y pagar al final de año.

En su caso actualmente tiene deudas con una librería y una ferretería a las cuales hasta el momento no ha podido cancelarles.

“Eso nos causa incomodidad porque hay un límite. Y no es que muchas veces no le quieran dar, sino que da pena. Yo tengo deudas con una librería de alrededor de $250 dólares de material que ya no pude comprar el año pasado y que lo necesitaba este año. Y en una ferretería tengo alrededor de unos $70 dólares de deuda. No nos cobran, pero se siente incomodidad porque si necesita más material da pena ir nuevamente a pedir sin llevar nada”, agregó el educador.

El profesor Saúl Rosales, director del centro escolar Urbanización Montecarmelo explicó que a ellos no les han depositado nada, ni para salario de personal administrativo ni para funcionamiento.

Expresó que su situación es más complicada, porque en su caso no reciben fondos porque el mismo Ministerio de Educación no les ha firmado los papeles que hacen constar que ahora son centros educativos administrados por Consejo Directivo Escolar.

“Andamos vendiendo dulces, ropa usada que una madre nos ha regalado y viendo de dónde sacamos ingresos para poderles pagar a tres maestros y al conserje, porque ya llevan cinco meses sin salario”, añadió.