Honduras alerta por la llegada de jefes de maras

Un grupo de la MS-13 ya está en La Virtud, Lempira. Los hondureños reforzarán sus fronteras

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Propondrán que cuando haya riesgo de fuga, las audiencias se realicen en los penales.

/ Foto Por EDH/ ARCHIVO

Por nacional@eldiariodehoy.com

2015-04-22 8:00:00

Honduras anunció ayer que reforzará la vigilancia en sus fronteras para prevenir una posible migración de pandilleros salvadoreños ante las medidas anunciadas por el Gobierno de El Salvador contra esos grupos delincuenciales.

Pero ya es tarde para Honduras. Fuentes de este periódico aseguran que toda la Ranfla (principales cabecillas), tanto de la Mara Salvatrucha (MS-13) como del Barrio 18, huyó hacia ese país desde hace dos semanas.

Los cabecillas han escapado a Honduras a raíz de una mayor persecución de parte de la Policía y de la Fuerza Armada, ante el recrudecimiento de la violencia desencadenada por mareros contra efectivos de esas instituciones, indicaron informantes de este matutino.

Ayer, el diario hondureño El Heraldo publicó declaraciones de Gustavo Escalante, comandante de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional (Fusina), de que no permitirían que lleguen delincuentes de otros países a delinquir en Honduras.

Según ese medio, Escalante aseguró que han recibido instrucciones desde el más alto nivel para fortalecer los escudos aéreo, naval y terrestre del país. “Estamos tomando las medidas (…) no vamos a permitir que vengan personas delincuentes de otros países a cometer ilícitos”, acotó Escalante a El Heraldo.

El funcionario añadió la creación de la Fuerza Maya Chortí en conjunto con Guatemala y dijo que “en muchos puntos ciegos en frontera con El Salvador también tenemos personal de la Policía Nacional, de Fuerzas Armadas, trabajando para evitar el paso de ilegales, de delincuentes de otros países”.

Sin embargo, lo que el funcionario ignora es que en varias casas del lugar denominado La Haciendita, municipio de La Virtud, en el departamento de Lempira, hay al menos 18 mareros salvadoreños que se han ido huyendo de la persecución gubernamental.

Diversas fuentes indican que primero, hace más de dos semanas, llegaron tres. Y una semana después, 15 más. En La Haciendita hay pandilleros hondureños que los han recibido en sus viviendas.

Un sector con escasa vigilancia

De acuerdo con las fuentes, La Haciendita es una aldea fronteriza con los municipios de Nombre de Jesús, en Chalatenango, y con Victoria, en Cabañas, la cual no tiene presencia de la Policía ni de la Fuerza Armada de Honduras.

Por parte de El Salvador, los puntos de vigilancia se reducen a la presencia de unos pocos soldados en el puente Integración, sobre el río Lempa, que une a Victoria, en El Salvador, y Mapulaca, en el lado de Honduras, y en un lugar llamado Las Placitas, en Nombre de Jesús, Chalatenango.

Entre Las Placitas y el puente Integración hay varias decenas de kilómetros, supuestamente sin vigilancia, que son aprovechados por contrabandistas y, ahora, por los mareros salvadoreños que se han instalado en La Haciendita.

No les permiten volver

Ayer mismo, a media mañana, según las fuentes de este rotativo, los pandilleros salvadoreños se movieron para el sector sur de la referida aldea, en dirección a un lugar que entre los habitantes fronterizos de ambos países, es conocido como El Embarcadero, en el río Lempa.

De acuerdo con los declarantes, los mareros mantienen bajo una estricta vigilancia a los habitantes de La Haciendita y zonas aledañas, para determinar si viajan a El Salvador o solo se desplazan al río Lempa.

Agregaron, además, que las medidas de seguridad de los mareros llegan a tal extremo que, a quienes se atraviesan el Lempa hacia Honduras, no les permiten volver.

Una fuente indica que hace una semana, en el municipio de Victoria, fue asesinada una persona porque se había regresado. Ese asesinato fue cometido en la colonia conocida en Victoria como La Zacatera, donde tiene presencia la clica Francis Locos Salvatruchos.

En el puesto policial de Victoria confirmaron el hecho. Sucedió el 15 de abril; lo mató la misma MS, aunque dijeron que fue por sospechas de que colaboraba con el grupo rival.

Sin embargo, la migración de los cabecillas ha sido hacia diversos lugares de Honduras. Algunos se han ido muy adentro del territorio de ese país vecino, explicaron las fuentes.

De acuerdo con los informantes, hacia Honduras han escapado, mayormente los de la MS-13; en tanto que los de la 18 han emigrado, en su mayoría, hacia Guatemala. Sin embargo, esto último no fue posible contrastarlo con fuentes de ese país.

Ataques contra policías y militares

Desde enero de este año, la MS-13 y la pandilla 18 han intensificado su accionar delictivo incrementando la cantidad de homicidios.

Asimismo, ambos grupos han asesinado a 19 efectivos de la Policía Nacional Civil, a siete miembros de la Fuerza Armada y a varios custodios penitenciarios, en momentos en que estos se encuentran descansando, en sus casas junto a sus familias.

El Gobierno ha reaccionado implementando algunas medidas como el traslado de cabecillas a Zacatraz y quitándoles algunos privilegios que les fueron otorgados por el Gobierno anterior, tales como la tenencia de televisores, ventiladores y equipos de sonido.

Diversos informantes indican que algunos también han sacado del país a sus familiares, como el caso de un cabecilla de la comunidad Las Palmas, en San Salvador, que está ubicada frente al complejo militar que alberga las oficinas del Estado Mayor Conjunto de la Fuerza Armada y al Ministerio de la Defensa, entre otros.