Un agente policial, un exalcalde y seis personas más fueron condenados a penas de tres a 16 años de cárcel tras encontrarlas culpables de los delitos de privación de libertad, robo y tenencia ilegal de arma de fuego.
El Tribunal de Sentencia Antimafia de San Salvador impuso 16 años al agente Víctor Manuel Durán, tres años y medio al exalcalde de San Pedro Masahuat, en La Paz, Milton Galileo González así como seis y ocho años a otras seis personas culpables.
Los sentenciados privaron de libertad a un empresario el 30 de diciembre de 2013, en el desvío de Las Isletas del municipio de San Pedro Masahuat, en La Paz.
De acuerdo con las investigaciones de la Fiscalía, las dos víctimas quienes se movilizaban en un vehículo fueron interceptadas por un grupo de sujetos, vestidos de policía, a quienes además robaron sus pertenencias y las mantuvieron ocultas por un tiempo.
Las investigaciones detallan que el agente policial, Víctor Manuel Durán, facilitó algunos uniformes policiales para utilizarlos en el cometimiento del delito.
En el caso del exalcalde de San Pedro Masahuat, Milton Galileo González, las autoridades le decomisaron un arma de fuego sin registro alguno en su vivienda.
González fue sentenciado a tres años de prisión y no podrá optar por el momento, a una medida alterna a la prisión, ya que la Fiscalía apeló ante la Cámara, por haber sido absuelto, en la etapa de instrucción o investigación, por otro delito.
El Ministerio Público estuvo en desacuerdo con la condena que el Tribunal le dio al exalcalde de San Pedro Masahuat, a quien lo señaló de ser el autor intelectual del rapto.
La Fiscalía añadió que las demás personas, cinco de ellas agentes policiales destacados en el 911 de Zacatecoluca y en la División Elite contra el Crimen Organizado (DECO), contribuyeron en el cometimiento del ilícito y por eso fueron condenadas.
Las investigaciones de las autoridades establecieron que la participación de los agentes policiales consistió en montar retenes policiales en la ruta que seguían las víctimas.
Los policías habrían dicho a al empresario que tenían información que en el interior del vehículo transportarían droga.
Varios días permaneció secuestrado el empresario en el municipio de Tamanique, La Libertad donde murió no directamente por el secuestro, sino de un paro al corazón.
La otra víctima que había sido secuestrada huyó de la escena y colaboró con las autoridades para dar con la estructura, varios meses después, entre mayo y junio de 2014.
El juicio se programó en más de tres ocasiones y que siempre su frustró, por fin se desarrolló a puerta cerrada, pues el juez le decretó reserva total.