La presencia de pandilleros salvadoreños en suelo hondureño fronterizo con El Salvador ha generado terror entre los habitantes del municipio de La Virtud, departamento de Lempira, a pesar de que el Gobierno de Honduras anunció que “blindaría” sus fronteras para evitar el éxodo de mareros de El Salvador, según un reportaje del periódico La Prensa del vecino país.
Periodistas del referido medio comprobaron, en una visita que realizaron al referido municipio, la presencia de un grupo de pandilleros de la mara Salvatrucha (MS) que ha ocupado varias casas del barrio El Calvario desde hace cinco meses, lo que ha despertado la zozobra y el temor entre sus residentes.
“Allí viven y operan a sus anchas porque cuentan con seis puntos ciegos que les permiten entrar y salir sin problemas de su país a territorio hondureño”, señala el artículo de La Prensa.
La semana pasada, el Gobierno de Honduras anunció que blindaría sus fronteras con El Salvador para evitar que pandilleros salvadoreños se fueran huyendo de la presión que ejercen las autoridades policiales y militares en contra de esos grupos ilegales.
Señala el artículo que el vado del río Lempa, Arcatao, Epicure, El Amatillo, La Haciendita y Gualcimaca son los puntos ciegos fronterizos por donde habrían pasado los pandilleros y los cuales están conectados con los departamentos de Chalatenango y Cabañas.
Señala el periódico hondureño que la alerta de la migración de pandillas salvadoreñas hacia el vecino país provino de medios de comunicación salvadoreños que informaron sobre el ingreso de los cabecillas de los mareros a Honduras.
Fuentes de Inteligencia confirmaron a El Diario de Hoy que los principales cabecillas de las pandillas mara Salvatrucha (MS) y de la 18 habían huido a suelo hondureño desde hace dos semanas por la presión de policías y militares.
Residentes de La Virtud confirmaron a La Prensa de Honduras que el paso de los pandilleros se da por los senderos sin ser detectados y también “los hemos vistos sacando drogas y armas en canoas por el río Lempa y al otro lado los esperan las camionetas que son las que después se internan en el municipio Nombre de Jesús en el vecino país (El Salvador)”, dijo un residente de La Haciendita, situada a unos 300 metros del río Lempa.
Otros lugareños aseguraron que los pandilleros salvadoreños han hecho del barrio El Calvario de La Virtud, su centro de operaciones al grado de llegar a obligar a varias familias a que los alberguen en sus casas; además de que han comenzado a construir sus propias viviendas.
“Han tomado los límites de las calles en el barrio El Calvario y han construido cinco casas, por eso las orillas del camino las han reducido”, acotó un vecino y agregó que otros de los pandilleros salvadoreños se han adueñado de una casa abandonada para sentar ahí su centro de operaciones criminales.
Lo que más preocupa a sus residentes es que La Virtud no tiene puesto policial y el más cercano se encuentra en Mapulaca, a unos 30 kilómetros. En La Virtud solo hay cuatro soldados, según el periódico.
Denunciaron los habitantes que los pandilleros han comenzado a reclutar a niños de 12 a 16 años para entrenarlos. “Los están metiendo al mundo de las drogas y los involucran en sus actividades ilícitas”, agregó un docente.