Dos policías asesinados en primeros 3 días de abril

Ayer mataron a otro policía en municipio de San Juan Opico

descripción de la imagen
El operativo policial y militar desarrollado ayer en el cantón Sitio Grande, no dejó resultados. No hubo capturas de sospechosos de matar al agente Alfaro Torres. Foto EDH / Mauricio Cáceres

Por Jorge Beltrán Luna nacional@eldiariodehoy.com

2015-04-03 10:00:00

Mientras el director de la Policía Nacional Civil (PNC) Mauricio Ramírez Landaverde asistía ayer al entierro del policía José Ernesto Sánchez Ávalos, asesinado el miércoles anterior, la familia de Héctor Wilfredo Alfaro Torres, otro agente policial, se preparaba para velar sus restos.

Alfaro Torres fue ultimado la madrugada de ayer en el cantón Sitio Grande, del municipio de San Juan Opico, departamento La Libertad, a poca distancia del lugar donde fue asesinado Sánchez Ávalos, sepultado ayer en el cementerio de Joya de Cerén.

Durante el sepelio de Sánchez Ávalos, Ramírez Landaverde repitió la misma frase que suele decir cuando asiste a escenas de asesinatos o a entierros de agentes policiales: “No nos arrodillaremos ante el acto cobarde de asesinar a agentes”.

Ramírez Landaverde prometió que el asesinato de Sánchez Ávalos no quedaría en la impunidad.

En menos de ocho días, tres agentes policiales han sido ultimados a manos de supuestos miembros de la mara Salvatrucha (MS-13), crímenes que han cometido posterior a que ocho miembros de esa agrupación criminal murieran al enfrentarse a balazos con elementos policiales, en la finca San Blas, del municipio de San José Villanueva, en La Libertad.

Entre esos ocho mareros muertos fueron identificados tres cabecillas de la MS-13 quienes tenían una amplia trayectoria delincuencial dentro de esa agrupación criminal, según autoridades.

Estaba departiendo

El policía Alfaro Torres se encontraba de licencia cuando fue acribillado en un lugar dominado por la MS-13.

De acuerdo con vecinos del lugar, horas antes de ser asesinado, el policía había participado en una actividad religiosa, en una iglesia católica que dista menos de 100 metros de su vivienda.

Luego de la actividad, Alfaro Torres se quedó departiendo con unos amigos. Ya se había tomado aproximadamente cinco cervezas y por un instante se separó del grupo para ir a un sanitario que estaba a pocos metros. Fue entonces cuando se escucharon varias detonaciones.

De inmediato, el agente policial cayó muerto mientras que sus asesinos, supuestos mareros, huían del lugar.

Alfaro Torres tenía 42 años y estaba asignado a la Subdirección de Tránsito Terrestre de la PNC, dependencia en la que llevaba varios años, según explicaron algunos de sus parientes.

El crimen contra Alfaro Torres fue cometido mientras en la colonia Nuevo Sitio del Niño, velaban al agente Sánchez Ávalos, quien estaba destacado en la Unidad 911 de Lourdes, municipio de Colón, siempre en La Libertad.

Operativo policial y militar sin resultados

Minutos después de que Alfaro Torres fuera asesinado, unidades especiales de la PNC apoyados por miembros de la Fuerza Armada de El Salvador (FAES) efectuaron un operativo de búsqueda de los responsables.

Sin embargo, hasta ayer a media mañana, el operativo no había dado frutos, pues las autoridades no habían registrado ninguna captura, contrario a lo que ocurrió el miércoles anterior, cuando la policía informó de múltiples arrestos de sospechosos de asesinar al agente del 911 de Lourdes.

En lo que va de 2015, 17 agentes policiales han sido asesinados; en 14 de esos casos, las autoridades han achacado esos crímenes a miembros de maras o pandillas.

En dos casos, los policías han resultado muertos tras liarse a balazos entre ellos mismos. Tal fue el caso del homicidio del agente Élmer Rodríguez Benítez, ocurrido en Ciudad Dolores, el 16 de febrero anterior.

Así mismo, los policías Josué David Godoy, de 30 años, y Stanley León Ramírez, murieron el 20 de febrero anterior luego de agarrarse a balazos al interior de una cervecería de la ciudad de Chalchuapa, departamento de Santa Ana. En ese hecho, los policías andaban con licencia y no se conocían entre sí. Luego de una ligera discusión, ambos sacaron sus pistolas y tras sentirse amenazados, se dispararon mutuamente. Un tercer agente resultó herido, dijeron testigos del hecho.

Racha de asesinatos

Los asesinatos de policías han aumentado con relación a los índices de 2014, cuando en todo el año, fueron 39 los agentes asesinados supuestamente a manos de miembros de pandillas.

La zona donde mataron a los últimos dos agentes es de alta incidencia de la MS-13. En ese mismo sector del departamento de La Libertad, entre diciembre de 2011 y febrero de 2012, varios miembros de la FAES fueron acribillados en ese lugar.

Uno de esos casos fue el del sargento mayor Fidel Ángel Molina Zavala, quien fue acribillado por delincuentes mientras estaba de licencia, mirando televisión.

El sector es dominado por la clica Sitios Locos Salvatruchos (SLS) de la MS-13.