LA LIBERTAD. Con el objetivo de seguir avanzando en el tema de prevención de desastres en el país, la cooperación japonesa aprobó la segunda fase del programa denominado GENSAI, cuyo significado en japonés es justamente prevención o mitigación de desastres provocados por fenómenos naturales.
El programa, que se desarrolló en su primera fase entre 2012 y 2014, consistió en la atención de prevención de desastres a través de la preparación y capacitación de expertos en el tema de desastres provocados por fenómenos de la naturaleza.
En este elaboraron manuales que ayudan a atender y comprender los problemas o afectaciones generados por la naturaleza en el país.
Gerson Martínez, ministro de Obras Públicas, señaló que “nos han dado la buena noticia que la segunda fase del programa GENSAI ya fue aprobada y que la Agencia de Cooperación japonesa (JICA) invertirá cinco millones de dólares para atender los temas de riesgo por deterioro en las infraestructuras del país a causa de lluvias, sismos, además el deterioro por riesgos químicos por la oxidación en puentes, suelos susceptibles y otros”, explicó Martínez.
La ayuda en este programa será técnica, según explicaron en JICA, y la duración será de tres años.
Martínez agregó que la cooperación proyectada para el tema ronda los 16 millones de dólares, ya que incluirá el programa de deslizamientos que se desarrollará entre los próximos tres o cinco años con una inversión de 10 a 12 millones de dólares no reembolsables.
Dentro de las obras ya planificadas para esta nueva inversión de la cooperación nipona está la ejecución de obras de control de deslizamientos en la colonia Las Colinas, en Santa Tecla, La Libertad.
Ese es un tema que estaba pendiente de resolver por el Ministerio de Obras Públicas (MOP), porque no contaban con recursos para desarrollarlo de forma total.
“Todos estos años MOP ha dado mantenimiento con mujeres en fase de semi libertad a la zona de las colinas, eso por la falta de fondos; pero nuestra política de multiplicación de los panes y los peces nos ha llevado a aprovechar al máximo y a realizar alianzas para que los recursos se multipliquen”, señaló.
Todo el programa en esta segunda fase está relacionado con el manejo del sistema de aguas lluvias, el diseño y control de obras de deslizamiento en laderas y taludes de las carreteras del Puerto de La Libertad.
También apostarán por la infraestructura verde y algunas otras novedades con las que buscan hacer de El Salvador un país menos vulnerable.
JICA aseguró que es importante que la naturaleza conviva con estas infraestructuras que sirven para la prevención de desastres.
“Quien dijo que en un paso de dos o tres niveles como los que vamos a construir tienen que ser obras grises frías y sin nada de naturaleza, por eso apostaremos infraestructura verde”, aseguró el ministro Martínez.
Para todo ello han planificado la elaboración de un diseño y plan maestro para iniciar las labores y convertir en infraestructura verde los pasos a desnivel del área metropolitana.
Según Martínez, es necesario invertir en cambiar la impermeabilización que existe con esos grandes estacionamientos en el país a través de tecnologías que permitan la infiltración de aguas lluvias.
Otro tema en el que trabajarán es hacer un levantamiento y registro de drenajes del país que por hoy es un asunto pendiente y crítico.