Azolvamiento afecta estero de Barra de Santiago

El turismo y la pesca han sido dañados debido a la poca profundidad. Medio Ambiente recibió una millonaria inversión que está invirtiendo en la zona

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Azolvamiento afecta estero de Barra de Santiago

Por Foto y texto: Cristian Díaz, comunidades@eldiariodehoy.com

2015-03-01 8:00:00

Los residentes del cantón Barra de Santiago, en Jujutla, están preocupados porque el estero se está secando debido al azolvamiento que enfrenta, producto de los sedimentos que arrastran cerca de diez ríos que ahí desembocan y a la contaminación que existe en la parte alta de la zona sur de Ahuachapán.

Comenzaron a experimentar el problema hace 33 años; pero se agravó en los últimos quince pese a que en un inicio, con herramientas manuales, trataron de extraer los sedimentos.

Sin embargo, esto les fue imposible, debido a que requerían maquinaria pesada con la que no contaban.

La situación ha causado niveles alarmantes entre los habitantes, porque donde antes andaban las lanchas de motor y de remo, ahora son playas que las personas pueden atravesar caminando.

La profundidad en algunas de las zonas alcanzaban hasta los 20 metros; pero ahora no sobrepasa de los cinco en las partes más hondas y otras áreas están completamente secas.

De hecho el antiguo embarcadero, que era el principal acceso al cantón antes de la construcción de la calle hace tres décadas, quedó en desuso por la gran cantidad de arena, lodo y trozos de árboles que comenzaron a cubrir el canal por donde se llegaba a este y que está entre manglares.

La Barra de Santiago es una Área Natural Protegida (ANP) que a mediados de año fue incorporada como el séptimo Sitio Ramsar de Importancia Internacional, de acuerdo a datos del Ministerio de Medio Ambiente (MARN).

Julio César Olla, residente, recordó que antes por ese canal pasaban 45 lanchas que se dedicaban a trasladar a las personas al cantón.

Pero la mayoría de ellas desapareció por el reducido espacio para navegar y las que aún se mantienen, una tercera parte, ya no tienen demanda de las personas que visitan el lugar.

Especies como pescados, cangrejos, camarón y conchas se han visto afectadas, ya que no se reproducen como antes.

Olla dijo que hasta hace cinco años obtenían hasta 40 libras de camarón en un periodo de cuatro horas; pero ahora apenas logran una.

La principal fuente de ingreso de esta comunidad es la extracción de las especies acuáticas; sin embargo, hoy solo subsisten del turismo que llega a mar, quienes se retiran sorprendidos del estado del estero.

También temen que otras especies de animales que viven entre los manglares, como mapaches, iguanas y cocodrilos, desaparezcan o emigren.

Otro de los argumentos que dan los pobladores para que el sitio sea atendido por las autoridades correspondientes es que es la única vía de evacuación que tienen en caso de un tsunami.

Eso se debe a que la carretera, que fue construida en terrenos privados, está en la misma línea del mar, lo que no les daría tiempo para salir del cantón.

La presidenta de la Asociación Pro Mejoramiento de Barra de Santiago, Evangelina Morán, dijo que han hecho gestiones con Medio Ambiente para solucionar el problema; no obstante, hasta el momento no han visto acciones concretas por parte de esta cartera de Estado.

El alcalde de Jujutla, Víctor Martínez, reconoció que entre las causas del azolvamiento está la tala de árboles de la parte alta, ya que donde antes eran zonas boscosas ahora se han reducido. Los ríos arrastran la tierra de los lugares erosionados.

Consideró que un 60 % del estero se ha perdido reduciendo las oportunidades de trabajo para los lugareños.

Eso los ha obligado, incluso, a extraer una especie conocida como mongueños, parecidos a camarones, para comercializarlos a pescadores de otros lugares, pues son utilizados como carnadas. La libra de estos se vende a un dólar.

Intervención

El asesor de biodiversidad del gabinete técnico del Ministerio de Medio Ambiente, Jorge Quezada, confirmó que desde finales de 2014 están implementando un proyecto que durará tres años, con el cual se prevé recuperar no sólo la zona de la Barra de Santiago, también la parte alta que es donde inicia el problema por una serie de prácticas agrícolas inadecuadas.

El mismo está siendo financiado por la Cooperación Alemana, que ha donado dos millones de euros que servirán para atender el estero y la zona sur del departamento de Ahuachapán, que está comprendida por los municipios de San Francisco Menéndez, Jujutla, San Pedro Puxtla y Guaymango.

Esta es conocida como el corredor biológico El Imposible-Barra de Santiago.

El experto reconoció que las personas que residen en este lugar mantienen una práctica agrícola de subsistencia sin velar por el cuido de medio ambiente.

El programa pretende cambiar la mentalidad de las personas a través de producciones amigables y el mejoramiento de sistemas ecológicos, como los manglares y los mismos cultivos.

Además, harán una reforestación en las zonas donde han talado árboles, y en caso de requerir maquinaria para la remoción de los sedimentos la utilizarán con el fin de mejorar las condiciones del corredor biológico.

Quezada explicó que pretenden intervenir 2 mil hectáreas de agroforestales, 10,000 hectáreas de sistemas boscosos bajo esquemas de protección, conservación y manejo sostenible; recuperación de 2,000 hectáreas de manglares y el ordenamiento de cultivos en la zona, lo que ayudará a recuperarla.