Por cuarta vez, el alcalde del Puerto de La Libertad, Carlos Farabundo Molina, quien es procesado por calumnias, no asistió al juicio en su contra, que estaba programado ayer en el Tribunal de Sentencia de Santa Tecla.
Tres abogados del alcalde justificaron la ausencia del funcionario, aduciendo que se encontraba con un padecimiento de amigdalitis (inflamación de las amígdalas).
Las defensoras entregaron al juez una certificación firmada y sellada por un médico privado, en la que establece el estado de salud de Molina.
En la nota, el galeno afirmaba que, en su condición, el alcalde tenía de tres a cinco días de incapacidad para reponerse y que por esa razón no pudo asistir a la diligencia.
Los abogados acusadores manifestaron al juez su desacuerdo con la constancia que el edil envió para demostrar la razón de su ausencia.
Los acusadores afirmaron que el alcalde es un empleado público y como tal debió haber recibido una certificación no de un médico privado, sino de un establecimiento del Ministerio de Salud Pública o del Seguro Social.
Lo que rayó con la confianza del juez y de los abogados acusadores fue que en diciembre del año pasado se suspendió el juicio por un argumento similar, expuesto en una constancia de un médico particular y no uno institucional.
En ese sentido, los abogados acusadores pidieron al juez que ordenara que un médico forense del Instituto de Medicina Legal, ya sea de Santa Tecla o de San Salvador, se desplazara a la casa del alcalde Molina para someterlo a examen médico, a fin de comprobar el estado de salud del edil.
De modo que el juicio fue suspendido para dar lugar a que la institución forense respondiera a la solicitud.
No descartan que el juicio sea realizado la próxima semana.
El alcalde Molina es demandado por el secretario de un Juzgado de Paz del Puerto de La Libertad. La víctima afirmó que en 2011, el alcalde lo denunció ante los magistrados de la Corte Suprema de Justicia en que lo vinculaba a grupos delictivos en el referido municipio.
A raíz de la denuncia del alcalde Molina, la jueza del referido tribunal separó por tres años y medio al secretario.
“La jueza me demandó en la Fiscalía, el alcalde tuvo una participación activa en todas las investigaciones, al igual que en todos los conflictos que se suscitaron en los tribunales”, puntualizó el secretario.
El secretario fue separado de su cargo a partir de 2009 y fui restablecido hasta el 21 de noviembre de 2012, cuando ella fue destituida y su cago lo tomó otro juez, que es el que está actualmente”.
Las denuncias y todos los líos que le formaron por la denuncia del alcalde afectaron la salud y la reputación del secretario al verlo como el peor delincuente.
De ser hallado culpable de dicho delito, el referido edil podría quedarse fuera de la contienda política, ya que se ha postulado nuevamente para ser reelegido como alcalde del Puerto de La Libertad.