Falta de fondos afecta al programa para prevenir retardo mental en niños

El Programa de Tamizaje funciona con fondos de cooperantes y de créditos

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Para realizar la prueba de hipotiroidismo congénito se extraen cuatro gotas de sangre del talón del bebé. Foto edh / archivo.

Por Yamileth Cáceres servicios@eldiariodehoy.com

2014-12-13 7:00:00

La falta de financiamiento ha afectado el funcionamiento del programa de Tamizaje Neonatal. Una situación que ha llevado a parar, por varios meses, la toma y el análisis de las muestras desde su creación en 2009.

Este año, a partir de septiembre se dejaron de hacer los exámenes por la carencia de reactivos. En un sondeo realizado en varias unidades de salud del Área Metropolitana de San Salvador, se constató que no realizan el examen a los recién nacidos.

Con la prueba se detecta el hipotiroidismo congénito, una enfermedad que produce retardo mental en las personas. Si la enfermedad se descubre en los primeros 28 días de vida, al niño se le inicia el tratamiento y se evita que el cerebro de los infantes sea afectado.

El programa arrancó a finales de abril de 2008, con fondos donados por Taiwán, pero el financiamiento para su continuidad no fue incorporado en el presupuesto del Ministerio de Salud (Minsal) y ha estado a expensas de la cooperación internacional y de préstamos.

De acuerdo con datos proporcionados por la Oficina de Información y Respuesta (OIR) del Minsal, en 2009, solo por seis meses tuvieron los reactivos, en 2010 fueron cinco meses, en 2011 el programa estuvo parado, en 2012 se tomaron las pruebas casi todo el año, en 2013 hubo pruebas en nueve meses y este año desde septiembre no hay.

“Debido a la falta de presupuesto no se contó con reactivos varios meses del año para cubrir los servicios”, se explica en el documento enviado por la OIR.

En 2009 y 2010, el programa funcionó con fondos de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), quien aportó $40,392 y $46,945 para comprar insumos.

En 2011, la Secretaría de Inclusión Social aportó $5,259, y entre 2012 y 2014 el programa funciona con recursos provenientes del Banco Interamericano de Desarrollo.

En 2012 se destinó $192,233. El año pasado fueron $251,969 y este año $148,719.

Aunque el presupuesto solicitado fue de $300 mil en 2012 y 2013. Este año pidieron $400,000.

Carlos Carmona, jefe de la División de Diagnóstico del hospital Bloom, indicó que “el programa ha estado funcionando, pero hemos tenido dificultades, nuevamente, presupuestarias”.

Carmona confirmó que el dinero que le otorgan no les alcanza para cubrir todo el año.

“Todavía estamos dependiendo de gestiones que hacemos para tener presupuesto para los reactivos de fondos donados o ya sea por préstamos del BID, buscamos a dónde se pueda”, expresó el jefe de la División de Diagnóstico.

Carmona señaló que para el próximo año les informaron que el financiamiento del programa estará incluido en el presupuesto del Minsal.

El hecho de que no se tengan fondos específicos en el presupuesto del Minsal limitan el programa, ya que no se logra comprar los reactivos para todo el año, aumentar el número de niños tamizados y cubrir la población que le corresponde al Minsal, reconoce Carmona.

El Minsal debería hacerle la prueba de hipotiroidismo a 96 mil niños cada año, pero en los últimos tres, se han tamizado entre 50 y 57 mil bebés, es decir, solo el 60 por ciento.

A los niños que se les diagnostica la enfermedad, inmediatamente, reciben el tratamiento y se evitan que sufran de retardo mental.

Un infante con hipotiroidismo congénito, sin tratamiento por mes, pierde cinco punto de coeficiente intelectual.

“La hormona tiroidea es vital para la formación del cerebro y el desarrollo físico de los niños”, acotó Carmona.

El martes 9 de diciembre se solicitó una entrevista con el Ministerio de Salud (Minsal) sobre el funcionamiento del programa y el financiamiento, pero no se recibió respuesta del personal de la Unidad de Comunicaciones.

En lo que va de 2014, se diagnosticaron a 23 bebés con hipotiroidismo congénito, cuatro de hipotiroidismo subclínico. En total, son 27 los casos detectados en lo que va de este año.

Roberto Majano, neonatólogo y presidente del Colegio Médico, manifestó que Taiwán aportó los fondos para el funcionamiento de un año y el compromiso de las autoridades fue que absorbería los costos y lo incluirían dentro del presupuesto.

“Considero que ha sido un programa irregular porque siempre han habido meses en los que no hay reactivos o insumos, entonces se dejan de tomar las pruebas”, expresó Majano.

El neonatólogo cree que el Minsal no le otorga el interés que requiere el programa.

“Lo que ha faltado es una sostenibilidad de parte del Ministerio para proveer de reactivos e insumos y efectuar las pruebas”, añadió Majano.

El especialista dijo que, cuando arrancó el programa, se hizo con la idea de ampliar el número de pruebas para detectar trastornos metabólicos y genéticos, algo que no ocurrió.

Ese estudio, en centros privados, tiene un costo superior a los $200 y se diagnostican unas 66 enfermedades.

Majano comentó que, si pasan meses sin hacerse los exámenes, puede escaparse algún caso. “El problema de que sea un niño no importa, pero es un niño que si se le detecta tempranamente ese problema, se puede evitar el retardo mental”, acotó el neonatólogo.