La imagen de la Virgen de Guadalupe, que está en la Basílica del mismo nombre, en Antiguo Cuscatlán, La Libertad, cumplió ayer 100 años, de que fue pintada en Roma, Italia.
El lienzo es una copia fiel de la que está en México, al igual que el altar, ya que fue elaborado por un nieto del arquitecto mexicano Luis Olveira.
El religioso somasco, Edgar Romero, contó que también la imagen fue bendecida por San Pío XI.
“La que tenemos en la basílica fue enviada por el presbítero Encarnación al cantón Las Delicias, en Santa Tecla. En ese entonces allí residían sus familiares y les mandó ese obsequio”, aseguró.
En ese entonces, La Ceiba era una humilde aldea casi despoblada, fue por esta razón que el Padre Brunetti quiso beneficiar a esta zona con un santuario dedicado a la Virgen de Guadalupe.
A través de sus gestiones se apresuró la construcción de la capilla a fin de que la obra quedará terminada el 12 de diciembre de 1921, para conmemorar así, el día de la Virgen.
Romero aseguró que todas las joyas que tiene la imagen fueron regaladas por el papa beato Pablo VI.
Pero también la Basílica celebró sus 92 años, tiempo en que el que ha recibido a millares de peregrinos, que año cono año siguen con la devoción a la Virgen de Guadalupe.
La Ceiba o Basílica de Guadalupe, como se conoce, continúa siendo dirigida por la Congregación Somasca, que mantiene viva la obra iniciada por San Jerónimo Emiliani, quien inició su obra de amor desde hace más de 400 años.
El historiador, Ricardo Castellón, afirmó que el templo posee un estilo ecléctico.
Es decir que es una mezcla de varias corrientes arquitectónicas, entre ellas neogótico, neoclásico, romano, entre otros.