Media vida dedicada a explotar pólvora

Durante 14 años, José Barahona es el responsable de hacer estallar la pólvora en los festejos patronales de la ciudad de La Unión.

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Barahona Umanzor se ha preparado para manipular la pólvora de la forma más segura. foto edh / insy mendoza

Por Insy Mendoza Comunidades@eldiariodehoy.com

2014-12-25 7:00:00

LA UNIÓN. José Armando Barahona Umanzor tiene 34 años de edad y durante 14 de ellos se ha dedicado a quemar la pólvora que cada diciembre la alcaldía de La Unión destina a los festejos patronales.

El hombre dice que son noches de desvelo y de gran responsabilidad para hacer estallar los petardos en cada celebración, ya sea nocturna o por las madrugadas.

Reconoce que manipular la pólvora requiere de práctica y mucho conocimiento para evitar una tragedia personal o de quienes están en los alrededores.

Asegura que para manipular la pólvora pasó unos cursos en la comuna sobre explosivos y cómo se deben manipular, luego tuvo unas capacitaciones en el Destacamento Militar Número Tres.

Los militares le enseñaron la forma de detonar la bomba de luces, las de explosivos y los cohetes de vara.

“A mí me encanta lo que yo hago, lo más peligroso es manipular la bomba número seis porque tiene un vapor de 1.5 de explosión que puede quebrar los vidrios de carros o vidrios de casas, para eso uno se debe ubicar en cruces de calles para evitar daños a inmuebles”, dijo Barahona.

Con toda la experiencia que cuenta, ha decidido enseñarles a otros jóvenes que también están interesados en aprender el arte de quemar pólvora y “algunos cipotes han aprendido andando conmigo cada año”, agregó.

Según él no se debe andar bajo los efectos de bebidas embriagantes, porque la pólvora se humedece; solo el hecho que una persona ebria agarra un cohete, ese contacto que hay humedece y al momento de prenderle fuego la explosión la tira en los alrededores.

Mauricio Valladares es un habitante del casco urbano, asegura que la responsabilidad que tiene cada año Barahona es de reconocerle, porque no solamente arriesga su vida, sino que trata de proteger la de quienes asisten a los eventos de las fiestas.