SAN MIGUEL. Durante años en la administración municipal han asegurado que el carnaval deja más gastos que ingresos a la comuna, debido a la enorme inversión que realizan para desarrollarlo.
Sin embargo, algunas cifras brindadas por las autoridades edilicias sobre el cobro que hacen a quienes deciden emprender algún negocio la noche de la gran fiesta, y el que pagan quienes se instalan en el campo e la feria durante toda la festividad, demuestran lo contrario.
Esas cifras brindadas por Óscar Wembesg, concejal, indican que la comuna migueleña podría percibir sólo en impuestos al comercio informal más de 20 mil dólares.
Eso sin contar muchos de los negocios formales que se instalan en San Miguel durante todo noviembre.
Sólo en el campo de la feria municipal hay 285 puestos de comerciantes de golosinas, comidas, dulces, ropas, artesanías y más, a quienes la comuna les cobra entre 30 y 82 dólares por vender todo el mes, dependiendo del tamaño del sitio de ventas.
Eso implica que las ganancias que la municipalidad obtiene como mínimo, solo en la feria, podrían rondar los 8 mil 550 dólares, partiendo que todos pagan 30.
Mientras que sería de 23 mil 370 dólares, suponiendo que los comerciantes paguen el tope de la tabla puesta por la comuna.
A ello se suma que para el día del carnaval cientos de comerciantes abarrotan las calles donde se realizan los conciertos, es decir, toda la avenida Roosevelt Norte y Sur, así como la Segunda y Cuarta Calle Oriente y Poniente, por mencionar algunas.
Además de los comerciantes que se ubican en los conciertos en los estadios Charlaix y Barraza.
Según explicó Wembesg, la comuna cobra por vender durante el día del carnaval 5 dólares a cada comerciante.
Explicó que para el cierre de las fiestas los vendedores que llegan son unos 800; sin embargo, todos los años se puede observar fácilmente a más de dos mil vendedores informales ubicados en diferentes puntos de la ciudad.
Si se toma la cifra dada por el regidor, gracias a los 800 comerciantes ingresarían, sólo ese día, cuatro mil dólares a las arcas municipales.
Al sumarlo con lo de las ventas en la feria, harían una suma de ingresos de más de 19 mil dólares a la comuna.
Pero si los cinco dólares de cobro por vender en la calle se multiplica por un aproximado de 2 mil comerciantes que venden el día del carnaval, la cifra de ingresos subiría hasta los 25 mil 904 dólares, sólo en los negocios informales durante una noche.
El alcalde Wilfredo Salgado aseguró que “la alcaldía municipal sólo tiene gastos en el carnaval, y esas ventas en la calle pagan un ingreso mínimo”, insistió.
Según Salgado, el pago no pasa los 50 centavos de dólar por comerciante, contradiciendo las cifras que su concejal Óscar Wembesg brindó.
Aseguró que los ingresos por el comercio informal durante el día del carnaval no pasa de los cuatro mil dólares.
Contradictoriamente, Salgado mencionó que en noviembre se generan muchas fuentes de empleo y que sólo el día del carnaval los trabajos informales pueden pasar los mil.
Mientras que durante todo el mes los empleos podrían triplicar la cifra anterior, ya que en todos los carnavalitos realizados durante los primeros 28 días hay decenas de vendedores de bebidas, dulces y más, que aprovechan la temporada.
El movimiento comercial en San miguel es tal la noche del carnaval, que los espacios públicos comienzan a ser reservados dos noches antes por los comerciantes.