Inundaciones causan pérdidas en 30 manzanas de cultivos

Las pérdidas fueron de más de 15 mil dólares, según costos aproximados de inversión

descripción de la imagen
Sembradíos de maíz, maicillo, pasto, además de hortalizas, terminaron inundados por las lluvias. foto edh /Insy Mendoza.

Por Insy Mendoza comunidades@eldiariodehoy.com

2014-10-24 7:00:00

LA UNIÓN. Los residentes del caserío Candelaria de La Rompisión, del cantón Piedras Blancas, de Pasaquina, están preocupados porque las últimas lluvias no solo inundaron sus viviendas, sino, además, causaron pérdidas por más de 15 mil dólares en sus cultivos.

Al inicio de la semana y tras las intensas lluvias, el río Goascorán que circula por la zona, pasó tres días desbordado, inundando las viviendas ubicadas en la ribera, afectando más de 30 manzanas de cultivos de maíz, maicillo y el pasto para ganado de las familias que ahí residen.

Máximo Posada es uno de los afectados, indicó que la cantidad de agua llenó el terreno en el que había sembrado una manzana de maíz, perdiendo unos 500 dólares que invirtió en el sembradío.

“Siempre que se ha desbordado el río se inundan las casas, pero hoy fue más fuerte, porque se perdió cultivos y también las gallinas”, señaló Posada.

Ana Julia Álvarez, dirigente de la comunidad, comentó que todas las casas de La Rompisión, ubicadas a orillas del río, fueron inundadas, “la gente perdió sus gallinas, se perdieron, además, unas treinta manzanas de pastos y también maíz”.

Santos Ventura fue otro de los afectados con las inundaciones, indicó que las lluvias generaron la pérdida de ocho manzanas de pasto.

“En años anteriores, el agua llegaba hasta los ranchos, pero hoy abarcó todos los terrenos y hemos perdido el maíz, el pasto también”, expresó Ventura.

Agregó que perdió, en su totalidad, las ocho manzanas de pasto para alimentar el ganado durante el verano, porque todo quedó anegado y lleno de lodo. Están preocupados porque no saben como harán para alimentar sus animales, pero sobre todo, como recuperar la inversión de una siembra que no se logró ni el mínimo.

Santos Andrade, residente de la comunidad, se dedica a la crianza de aves para vender, mencionó que perdió parte de su negocio con las inundaciones.

“Unas 50 aves, entre gallinas y pollos, perdí. Algunas se murieron ahogadas y otras por el frío. También el maíz, además de hortalizas como chiles, tomates, pepinos, todo lo perdí”, sostuvo Andrade.

Los vecinos coincidieron en que las instituciones de Gobierno que atienden la emergencia deben hacer la cuantificación de otros daños en las comunidades y brindar ayuda para recuperarse de las pérdidas.

“Ojalá hagan una cuantificación de todo lo que hemos perdido dentro y fuera de las casas, y que, sobre todo, nos apoyen al menos con la entrega de más insumos para poder sembrar y recuperar algo de cosecha”, explicó Andrade.

De las ochenta viviendas del caserío Candelaria de La Rompisión, unas 27 pasaron anegadas por tres días, dijo la dirigente Álvarez.

Daniel Reyes, vicegobernador, aseguró que, hasta el momento, los líderes de la comunidad solo le han pasado el reporte de las familias afectadas por las inundaciones.

“Ya estamos gestionando los víveres, hablé con los técnicos del Ministerio de Agricultura (MAG), pero ellos aún no tienen un consolidado, pero harán un recorrido por la zona inundada para determinar la pérdida de cultivos”, aseguró el funcionario.

Mencionó que tienen un listado con 192 familias afectadas y explicó que a todas se les entregarán víveres, pues muchas de estas familias sobreviven de la pesca y esta labor tampoco la pueden hacer por la cantidad de lluvia que ha caído.

Los afectados perdieron, en sus casas, muebles y diferentes artículos.