El Congreso de Nicaragua aprobó recientemente una reforma legal que permite a la estatal Empresa Nicaragüense de Petróleo S.A. (Petronic) asociarse a las compañías que reciban concesiones para la exploración y explotación de petrolera en ese país, según publica el periódico nicaragüense Confidencial.
La enmienda, realizada a la Ley Especial de Exploración y Explotación de Hidrocarburos, permitirá que Petronic participe como socia “sin costo ni riesgo alguno”, lo que ha levantado suspicacias en diputados de oposición.
Según la publicación, las dudas radican en la falta de transparencia que, señalan diputados, existe en dicha empresa estatal, la cual es propietaria del 49 % de las acciones de Alba de Nicaragua S.A. (Albanisa) que recibe cooperación petrolera venezolana desde 2007.
Por otra parte, según señala el periódico nicaragüense, el presidente de Petronic es Francisco López Centeno, tesorero de Ortega y del FSLN, además de vicepresidente de Albanisa, quien ha sido denunciado por supuesto desvío de los fondos de la cooperación venezolana a empresas familiares y el otorgamiento de préstamos a empresas vinculadas a la familia del mandatario.
De acuerdo con declaraciones del diputado de oposición Carlos Langrand, consignadas por Confidencial, “el ingeniero López es un instrumento de lo que concibe Daniel Ortega como un asalto al poder, a hacer negocios bajo la camisa del Estado, pero que en el fondo son privados”, acotó.
Petronic deja pobre ganancia
A pesar de ser un oligopolio, dueño del 49 % del gigante Albanisa, Petronic solo reportó ingresos al presupuesto del Estado por 1.7 millones de dólares en 2013.
Según estimaciones del diputado Langrand, por realizar la importación de petróleo al país, Petronic percibe unos cien millones de dólares de utilidades, pero solo aporta una mínima cantidad al presupuesto nacional.
“De esos, a Nicaragua le podrían tocar unos cincuenta millones”, apuntó. Pero en realidad, lo que aporta Petronic al Estado no alcanzan ni los dos millones de dólares.
Anualmente, Petronic importa un promedio de siete millones de barriles de petróleo. Según Langrand, esta y otras transacciones son hechas como si esta fuese una empresa privada.
“El giro de esta estatal es ofertar un servicio público al Estado y generar recursos suficientes para que ingresen al Estado y a su vez poder traducirse en inversiones dentro del presupuesto para gastos sociales e inversión misma del Estado, pero ellos no contribuyen al erario”, afirmó Langrand.
La presidenta de la Comisión de Infraestructura de la Asamblea Nacional, la sandinista Jenny Martínez, sostuvo que la ley no prohíbe que una empresa como Petronic represente al Estado de Nicaragua en una sociedad con transnacionales petroleras.
Martínez dijo que las concesiones serán otorgadas por el Ministerio de Energía y Minas (MEM), y explicó que en el caso de Petronic se busca que el Estado participe en este giro de negocios, como las grandes petroleras del mundo como Pemex, Petroecuador, Petroperú, y Petrobras que sí tienen recursos para ello.
“Hay una empresa que está interesada en venir, es holandesa, quiere venir a Nicaragua a hacer esos acuerdos. Si viene la empresa holandesa pediría permiso al MEM y cuando ya estén otorgados los permisos hablaría con Petronic en el caso de que hubiera yacimiento (habría que) ver cómo se manejaría”, dijo.