El derecho a no migrar fue la punta de lanza para que Glasswing International junto a más de 50 voluntarios y la alcaldía de Santa Tecla celebraran el Día Global de la Dignidad y compartieran charlas en 12 centros escolares de Santa Tecla, Ciudad Delgado y San Salvador.
A las siete y media de la mañana, los voluntarios de diversas empresas impartieron aula por aula el tema de la migración, el cual llegó a unos mil 800 jóvenes de séptimo, octavo, noveno grado y bachillerato.
Los voluntarios iniciaron la jornada con una pregunta base: ¿Qué es la dignidad? Algunos respondían amarse uno mismo, otros contestaron tener una vida digna. Los facilitadores los felicitaron por la participación y les explicaron los valores que van intrínsecos a la dignidad humana.
La dinámica de los voluntarios se tornó amena, ya que cada uno se las ingenió para llamar la atención de los estudiantes.
La vicepresidenta de programas y cofundadora de Glasswing International, Celina de Sola, participó del festejo y motivó a los estudiantes a buscar las oportunidades dentro del país.
“Este año decidimos el tema de la migración, pero viéndolo desde los que se quedan, la dignidad de ellos y el derecho que tienen de no querer migrar, aunque sus familiares estén en otro país y de las oportunidades que hay en El Salvador para que puedan cumplir sus sueños de vida”, recalcó De Sola.
El Día de la Dignidad se conmemora en 71 países, en los que se incluye Guatemala, Honduras y Panamá, que es donde también trabaja Glasswing International.
En el país es tercera ocasión que se realiza y “lo seguiremos fomentando para reforzar los valores que implica la dignidad humana y su ejercicio en la vida diaria”, enfatizó De Sola.
Hoy finalizan las actividades con la proyección del documental “Ausentes”, en el Instituto Nacional José Damián Villacorta, en Santa Tecla, La Libertad. La cita es a las ocho de la mañana.
Sobre “Ausentes”
Es un documental del periodista de El Diario de Hoy Tomás Guevara, quien reside en Washington, en Estados Unidos.
En 2009 fue presentado el filme, el cual es una mirada intimista a las relaciones afectivas entre madres e hijos separados por la distancia.
Explora las emociones profundas y los sentimientos encontrados en estas familias, con las barreras físicas y legales que les impiden reencontrarse.
Este filme realizado en EE.UU., El Salvador y Honduras fue producido con el apoyo de Cinergia Costa Rica, y la Agencia Española para la Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), como parte del programa “Migraciones Mirando al Sur”.
El documental de 36 minutos se adjudicó, en noviembre de 2010, la estatuilla del Festival Centroamericano de Cine y Vídeo Ícaro Guatemala, en la categoría de mejor corto documental de Centroamérica.