Algunas de las armas que están en manos de salvadoreños de forma ilegal, podrían estar siendo usadas para asesinar o cometer diversos delitos, afirmaron ayer las autoridades de Justicia y Seguridad Pública, durante la inauguración de la Primera Reunión del Grupo de Trabajo de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
En el encuentro, donde participan representantes de 33 países latinoamericanos, y que culmina hoy, el ministro de Justicia y Seguridad Pública, Benito Lara, abogó por una reforma a la Ley de Armas para resolver este problema.
En la modificación legal, el ministro afirmó que hay una reforma en trámite en la Asamblea Legislativa, que manda el marcaje del fabricante, en el que se incluya en el código de barras, el país que autoriza la compra de armas, así como la armería que las distribuirá y el nombre del cliente final, explicó Lara.
Con esa información, las autoridades podrán fácilmente dar con el responsable, en caso de haberse utilizado para un hecho de violencia.
“Uno de los problemas que hemos tenido es que varias empresas han perdido armas, y otras cuando desaparece armamento, acumulan otro y se quedan con grandes cantidades “, puntualizó.
Lara reconoció ante las autoridades latinoamericanas que a pesar de haber decomisado más de 68 mil armas de fuego entre junio de 2009 y septiembre de 2014, los homicidios con armas de fuego no han disminuido.
Entre el 80 y 90 por ciento de los asesinatos registrados en el país, son cometidos con armas de fuego, afirmó el subdirector de Armas y Explosivos de la Policía, Evaristo Padilla.
En la reunión, las autoridades buscan prevenir y combatir el tráfico ilícito de armas en toda la región.