El apoderado legal de Enel Green Power, Francisco Bertrand Galindo, afirmó que la firma energética de capital italiano espera que las autoridades de la Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (CEL) y de Inversiones Energéticas S.A. de C.V. (INE) muestren disposición de negociación y diálogo para evitar llegar a la fase del cumplimiento forzoso del laudo arbitral, vía la homologación de sentencia del tribunal de París ante la Corte Suprema de Justicia (CSJ) salvadoreña.
Si se opta por este escenario, Enel tiene dos años, vigentes desde ayer, para “obligar” (en el marco del Código de Procedimientos Civiles) a que INE acepte el programa de inversiones y otros aspectos que determinó la Cámara Internacional de Comercio (CCI) en 2011, fallo que quedó en firme esta semana luego que la corte de Casación de Francia así lo determinó. Esto convertiría a los italianos en accionistas mayoritarios de LaGeo, empresa que genera un margen de utilidades al Estado, a través de CEL.
Sin embargo, Bertrand Galindo afirmó que Enel, previo a esa posibilidad, sigue apostando por el diálogo y la negociación para dirimir el conflicto, sobre todo porque en el análisis del recurso de casación no se encontró ninguna anomalía en relación al proceso de elaboración del laudo, en especial en lo que conlleva el valúo de acciones de LaGeo.
“Yo esperaría que el Gobierno abra mecanismos para no tener que llegar a la penosa fase del cumplimiento forzoso del laudo. Para Enel tener un laudo firme, sin nulidad, es una clara señal de que se avanza en buscar desactivar el hostigamiento hacia el inversionista extranjero, tanto en temas energéticos como en otras áreas”, reflexionó.
En este sentido, Bertrand Galindo confirmó que se mantiene vigente la inversión de más de $128 millones en siete diversos proyectos, algo en que Maurizio Bezzeccheri, presidente para América Latina de Enel, dijo que se necesitan “dos experiencias exitosas para conformar una alianza estratégica que permita posicionar LaGeo como una empresa con proyección internacional para beneficio de El Salvador”.
Otra opción que tiene Enel es apegarse al Convenio de San José de Arbitrajes Comerciales, con lo cual el laudo no requerirá homologación de la CSJ y se pueden presentar directamente a los jueces.
“En este caso se está ante un arbitraje de tipo mercantil porque la disputa es entre dos socios, dos sociedades anónimas. Es probable que no sea necesario ir a Corte Plena y que se vaya a tribunales en caso que no se den acercamientos”, explicó Bertrand.
Por otra parte, en las conversaciones de propuesta de cumplimiento entre las partes también se debe de definir si se aplicará el mecanismo de la cláusula seis del Acuerdo de Accionistas para financiar crecimientos. Acá existe la posibilidad de tomar porcentajes de las utilidades o proyectar financiamiento con emisiones de bonos u otros.
“Es regla de juego para CEL e INE cumplir el acuerdo de accionistas. Enel está dispuesto a negociar. Eso es lo primero para cumplir el laudo. Si yo me someto para que un tercero decida sobre el conflicto eso es legalidad, es la filosofía del Derecho”, puntualizó Bertrand. Él ve un mejor clima de negociación con los representantes de CEL e INE, encabezados por el presidente David López Villafuerte (quien preside ambas instancias), y reconoce que no hay ningún impedimento en revisar el acuerdo de accionistas para encontrar la mejor solución en el marco del laudo del Tribunal de París.
Enel fue elegido como socio estratégico de INE en 2001 y fue en 2008 cuando la autónoma se negó a concederle la capitalización de sus inversiones, incumpliendo el contrato original y dando lugar al largo litigio.