El subdirector del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS), Benjamín Coello, informó ayer que tienen previsto adquirir un nuevo acelerador lineal que sirve para dar tratamiento de radioterapia a pacientes que tienen cáncer en distintas partes del cuerpo, por ejemplo, cuello, garganta o mamas.
En la actualidad esa institución cuenta con uno de esos equipos, pero tal como El Diario de Hoy ha publicado en los últimos días, dicho aparato se ha arruinado 14 veces entre febrero de 2013 y julio de este año, según datos de la Oficina de Información y Respuesta (OIR), del ISSS.
Los datos brindados por la mencionada oficina indican que el año anterior, debido a las fallas en el acelerador lineal, le suspendieron sesiones de radioterapia a 277 derechohabientes, y este año, a 131.
A eso suma que la reparación constante de la máquina también ha implicado una inversión significativa de parte del Seguro Social. Sólo el año pasado invirtió un poco más de 333 mil en mantenimiento correctivo del mismo.
Tras las publicaciones de este periódico, el doctor Coello reconoció que el acelerador lineal en uso ya tiene diez años, y prácticamente terminó su vida media útil.
“(El nuevo equipo) cuesta 4.8 millones de dólares y ya se está haciendo el procedimiento de compra”, aseveró el funcionario al consultarlo sobre las soluciones que contempla la institución para solventar el problema.
“Ahorita se han hecho las bases de licitación. Luego tienen que ser aprobadas por el ente respectivo, que es el Consejo Directivo del Seguro Social. Luego hay que nombrar una comisión evaluadora de ofertas, publicar la oferta por todos los medios de comunicación masivos, recibir las ofertas, evaluarlas, etc. y eso toma aproximadamente de dos a tres meses”, detalló el subdirector del ISSS.
Según sus cálculos, para el primer trimestre de 2015 la institución ya podría tener instalado el nuevo aparato, porque, por experiencia, saben que cuando compran los equipos, la entrega no es inmediata. “Ellos (proveedores) tienen que encargarlo y, generalmente, se trae de Europa o Estados Unidos. Tarda de dos a tres meses en traerlo al país, porque es vía marítima”, subrayó al ser consultado sobre una posible fecha de llegada del aparato.
La máquina que se adquiera podría ser colocada en la Torre de Oncología, en donde el médico aseguró que tienen capacidad instalada para ello.
Sin embargo, el doctor Benjamín Coello también reconoció que en este momento les hacen falta médicos especializados en este campo.
Para hacer frente a esa situación, han contemplado que por medio de beca algún personal médico que labora para la institución viaje al extranjero a especializarse.
Coello aseguró que no tienen problemas con la disponibilidad de técnicos que manejen el acelerador y tampoco con personal de enfermería.