Excabo de la PNC pide asilo en México

Hasta el miércoles pasado, 17 miembros de la Policía han sido asesinados en 2014, según el director de la PNC

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Publicación de Milenio sobre el excabo de la PNC que pide asilo por las pandillas. Foto EDH / archivo

Por Agencias Jorge Beltrán Luna

2014-08-09 7:00:00

Un excabo de la Policía Nacional Civil (PNC) es parte de la gran cantidad de salvadoreños que huyen del país, debido al asecho de las pandillas.

Roberto H., quien teme por su vida, se encuentra en un refugio para migrantes en Tapachula, México, país al que ha solicitado asilo tras ser víctima de las maras en El Salvador, según comenta una publicación del periódico digital mexicano, Milenio.

El hombre de 45 años narró el calvario que pasó al ser atacado a machetazos por estos grupos ilícitos, hace tres meses, cuando se dirigía a visitar a su madre en San Salvador.

El salvadoreño sobrevivió al atentado perpetrado por pandillas; sin embargo, ahora, las cicatrices en su rostro considera que lo convierten en un blanco seguro para las maras, en caso de regresar al país.

Explicó que las heridas en el rostro atraen, automáticamente, la atención de las pandillas. “Son un letrero a flor de piel que se utiliza para estigmatizar a traidores, aquellos que han desertado o quienes pertenecen a una banda rival. Una moderna letra escarlata”, detalló el medio.

Hoy, el expolicía asegura que su vida está en manos del gobierno mexicano, ya que de regresar a El Salvador es enviarlo a la muerte.

“¡Yo no quiero ir a Estados Unidos! Quiero quedarme en México. Necesito que me den asilo en el país —implora—. Si vuelvo, me matan”, dijo el inmigrante salvadoreño al periódico digital.

No obstante, su petición de asilo a la nación azteca, de momento, se encuentra en el limbo, caso similar al de varias que han hecho otros migrantes centroamericanos, pues según estadísticas de la Secretaría de Gobernación de México, el 82 por ciento de todos los migrantes de la región que piden refugio en ese país son rechazados o retiran sus casos.

El caso de este expolicía salvadoreño hace eco en los de otros tantos migrantes que en las últimas semanas han arribado a territorio mexicano, solicitando asilo ante el colapso de la seguridad pública en Honduras y El Salvador.

“Solo sé que si pierdo, me voy a tener que esconder en este país… Mi vida en El Salvador se terminó”, afirmó.

Las razones que esgrime Roberto H., no son infundadas. El miércoles anterior, el director de la Policía Nacional Civl (PNC), Mauricio Ramírez Landaverde, afirmó que en lo que va de 2014, 17 policías han sido asesinados, 12 de esos casos han ocurrido mientras los oficiales estaban fuera del trabajo, es decir, con licencia. En tanto, los otros cinco casos ocurrieron en actos del servicio. Nada menos, el jueves anterior, el agente Ronald Omar Canizález fue asesinado dentro de un autobús en Santa Ana.