El secretario General del FMLN, Medardo González, evitó hablar, ayer, sobre la venta de la planta de Alba Petróleos, en Acajutla, a la venezolana PDV Caribe S.A., por un valor de $104 millones 108 mil 427, en diciembre de 2012.
Consultado al respecto, durante una conferencia para dar detalles sobre la XXXI Convención Nacional Ordinaria del FMLN, González dijo que ese espacio no era para preguntas sobre Alba Petróleos.
“Mire, esa no es pregunta de esta conferencia, disculpe pero no…”, señaló.
Ni el partido, del que un grupo de alcaldes forma la sociedad Enepasa, ni los directivos de la empresa se han pronunciado sobre este tema. La oficina de comunicaciones de Alba Petróleos dijo que el gerente general, Miguel Hernández, podría hablar del tema la próxima semana.
Prevén “quiebra”
La falta de transparencia en este tema ha sido criticada por varios sectores, entre ellos, la Fundación Nacional para el Desarrollo (Funde) y la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP).
El directivo de la ANEP y presidente de la Cámara de Comercio, Luis Cardenal, aseguró que es necesario hacer una auditoría a la empresa para determinar porqué se realizan transacciones como la venta de la planta de Acajutla, denominada Schafik Handal.
“Si se hace una auditoría contable, rigurosa, como se le hace a cualquier empresa, lo más probable, y no lo decimos con seguridad porque esos datos no se han dado a conocer con transparencia, pero lo más probable es que veamos que contablemente Alba está quebrado”, señaló Cardenal.
Para Cardenal, es un punto de preocupación la falta de información sobre las operaciones de dicha empresa, la cual está vinculada con el partido de Gobierno, aseguró.
“Creemos que eso no es sano y que las cosas que se hacen a espaldas del conocimiento público muchas veces es porque se tiene algo que ocultar”, aseveró.
Por otra parte, consideró que una de las razones por las que la empresa vendió la planta en Acajutla es para adecuar la empresa al convenio Petrocaribe entre El Salvador y Venezuela.
Según el dirigente gremial, no se sabe si la deuda que tiene Alba Petróleos con Venezuela, que asciende a $745 millones, se convertirá en deuda soberana o será cancelada por los socios de la empresa.
“Y la gran pregunta es, al hacer el traspaso de Alba Petrocaribe, ¿qué va a pasar con esa deuda, quién va a ser el responsable? Si es el Estado salvadoreño, significa que lo seremos todos los ciudadanos, o si eso va a quedar entre los socios de Alba y ellos se harán cargo de ver cómo resuelven esas cuentas por pagar?”, cuestionó.
Por otra parte, agregó que no se ha dejado del todo claro los términos de ese convenio ni los beneficios que el mismo traería para El Salvador.
“Señalamos desde el primer momento que este acuerdo con Petrocaribe debería ser de cara a la población. Hemos visto que se firmó y no se ha vuelto a saber nada y no se ha dicho cuáles son las condiciones, los términos, las obligaciones, los beneficios, y cómo esos beneficio se van a trasladar a la población. Nada más se hace la gran bulla y se firma el convenio que compromete al país”, manifestó.