Condenan a dos hermanos policías a 12 y 14 años de cárcel por violar a dos niñas

Los agentes estaban destacados en la delegación de Sonsonate

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Una de las niñas advirtió a los policías violadores: "si llega a saber de esto mi papi, haber que puede pasar", momentos en que fueron amenazada de muerte. Foto EDH / Archivo

Por Jaime López sucesos@eldiariodehoy.com

2014-08-15 12:00:00

Los resultados de la prueba ADN (ácido desoxirribonucleico) y el relato de las dos jóvenes ofendidas, fueron contundentes para que el Tribunal de Sentencia de Santa Tecla encontrara a dos agentes de la PNC culpables del delito de violación y agresión sexual agravada.

Los policías, ambos hermanos Rodrigo Alfonso y Élmer Samuel González Galicia, destacados en las delegaciones de Sonsonate y Santa Tecla fueron condenados a 14 y 12 años de prisión.

Los jueces también fundamentaron su fallo en los exámenes realizados a las víctimas y acusados.

La investigación detalla que los hermanos González Galicia se aprovecharon de que conocían a las dos víctimas, hermanas entre sí, para darles un “aventón” o llevarlas a un destino cercano.

Según la denuncia, estos hechos ocurrieron el 26 de marzo de 2013 cerca de las 2:30 de la tarde, cuando las adolescentes de 14 y 15 años se dirigían a la casa de una compañera de estudio situada a unas cuatro cuadras, en la avenida el Río de la urbanización Campos Verdes II, en el cantón Lourdes, Colón.

En esa ocasión, los policías a bordo de un pick up, se detuvieron y preguntaron a las adolescentes ¿hacia dónde se dirigían?, ellas contestaron que a casa de una compañera, a realizar unos deberes.

Los implicados, les ofrecieron llevarlas y ellas, como eran personas conocidas y más que se trataba de dos agentes policiales, las jovencitas accedieron y se subieron al vehículo.

Sobre la marcha, Rodrigo, el conductor del vehículo les dijo que primero iban a ir a donde una tía suya, en la finca Agua Fría, contiguo a la urbanización Campos Verdes.

Al llegar a casa, Rodrigo dijo a la hermana mayor que se bajara y que lo acompañara a la vivienda. La joven creyendo que todo estaba en orden y que en la residencia se hallaba la tía del agente, se bajó del automotor.

Luego, Nelson Samuel, el otro agente, tomó del brazo a la otra menor y la metió a la casa que minutos después resultó que estaba deshabitada.

En ese momento, comenzó el problema, pues Nelson Samuel tomó por la fuerza a la joven, le quitó la ropa y abusó sexualmente de ella.

Mientras, Rodrigo Alfonso, el otro agente dentro del vehículo intentaba hacer lo mismo con la hermana menor.

Consta en el expediente judicial que Rodrigo Alfonso trataba por la fuerza de besar y abrazar a la niña, agrediéndola sexualmente de manera reiterada.

Más tarde, los policías con cinco años de servicio, amenazaron de muerte a las dos niñas, las subieron al vehículo y ya no las llevaron a casa de su compañera, sino al lugar de origen. Pasaron 15 días, hasta que una de las niñas notó que estaba embarazada, que contó lo sucedido a una amiga y esta dijo a sus padres. Los Policías fueron denunciados y tres meses después fueron capturados y ahora condenados.