Empresarios escépticos por construcción de baipás

Algunos empresarios confían en que obra atraerá inversión, otros dicen no hay incidencia La obra de paso será construida con un préstamo que hará el gobierno de Japón

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La moción para el crédito del baipás no ha sido llevada a la Asamblea para su ratificación.Los empresarios de la zona esperan que, con la construcción de la megaobra, el comercio se dinamice; aunque otros lo ven como una obra de paso más.

Por Lucinda Quintanilla comunidades@eldiariodehoy.com

2014-08-24 6:00:00

SAN MIGUEL. La construcción de un baipás en San Miguel, cuya obra ejecutará el Gobierno a través de un préstamo que le hará Japón, trae esperanzas de desarrollo para algunos empresarios de la zona, pero a otros les parece que en poco o nada abonará dicha edificación para el crecimiento económico de la ciudad.

Howard Gutiérrez, presidente de la Cámara de Comercio filial San Miguel, fue enfático al asegurar que “tenemos muy pocas expectativas con respecto a la construcción del baipás porque es una obra de paso, el comercio no se quedará en San Miguel”.

Agregó que eso no significa que la obra no sea buena y que ayudará a descongestionar la entrada de San Miguel; pero aclaró que eso no se traduce en que habrá inversión en la región o se abrirán nuevos negocios.

Explicó que hay otros problemas que sí inciden directamente con el crecimiento económico en la zona, entre ellos la delincuencia que les sigue generando grandes pérdidas a los empresarios; además de los nuevos impuestos y políticas nada favorables para el sector.

Pero para otros empresarios como José Herrera, la construcción del baipás es una esperanza para que de una vez entre a funcionar el Puerto de La Unión y, ahí, el baipás se traduce en una megaobra en extremo beneficiosa para los empresarios, ya que se reducirían los tiempos de recorrido para el sector comercio y exportador que transitarían por esa construcción.

Herrera indicó que “la obra permitirá mayor fluidez, al igual que más vehículos de carga pesada circulando por la zona, sin obstaculizar el paso de los carros livianos o el transporte público”.

Uno de los sectores que serán beneficiados con ese proyecto, según Herrera, son los que se dedican a las exportaciones porque tendrán ahorro de combustible y acortarán los tiempos en cada viaje al circular por la Carretera Panamericana, pasando por San Miguel y circulando por la Ruta Militar que son gran tráfico, hasta llegar a la Frontera El Amatillo, en La Unión.

Herrera sostuvo que la construcción de la derivación será mejor aprovechada, en caso que se habilite el Puerto de La Unión, debido a que la demanda de contenedores con mercadería importada y para exportar, será mayor.

También valoró que si se pone en marcha el Puerto de La Unión y no se construye el derivador, el tráfico por la Panamericana podría colapsar.

“Si el puerto es habilitado podríamos movilizar más mercadería a costos mucho menores, pues la ruta será más corta, las importaciones serían con menos costos porque muchos hacen sus transacciones desde el Puerto de Acajutla”, dijo el empresario.

Por ahora la circulación de tráfico pesado en San Miguel es alta, ya que cada cinco minutos entra un furgón por la frontera El Amatillo y que deben pasar de forma obligada por San Miguel, ya sea usando la Panamericana o la carretera El Litoral.

“La habilitación del Puerto podría permitir un máximo aprovechamiento del baipás y la puesta en funcionamiento del Puerto es urgente para nosotros los empresarios, al igual que la construcción del baipás que beneficiará en mucho a este departamento tan importante en el país”, expresó Herrera.

Avance del proyecto

Hace algunas semanas el Gobierno salvadoreño, con el japonés, realizó el canje de notas para que el préstamo de 121 millones de dólares sea aprobado y puedan construir el proyecto.

El Ministro de Obras Públicas, Gerson Martínez, aseguró que el mismo permitirá agilizar el tráfico pesado que a diario circula por la Carretera Panamericana y la Ruta Militar para llegar a la frontera El Amatillo.

“Hace varias semanas fui a la Asamblea Legislativa a explicar el proyecto e hice la solicitud y fue autorizada por unanimidad”, indicó Martínez.

Agregó que una vez aprobada la petición, el Ministerio de Obras Públicas (MOP) comenzó un proceso para la petición del préstamo al Gobierno japonés a través del ministerio de Relaciones Exteriores, quien hizo efectivo con el canje de notas.

“Se está terminando la negociación y en unos 15 días estará lista para la segunda ronda del voto calificado en la Asamblea Legislativa, y esperamos sea aprobado por unanimidad”, expresó.

La megaobra tendrá un costo de 121 millones 579 mil dólares y su construcción podría desarrollarse en tres años, explicaron las autoridades.

El proyecto constará de 21.87 kilómetros que serán ampliados a cuatro carriles, 3 kilómetros y medio de estos estarán entre el municipio de Moncagua y el desvío conocido como El Obrajuelo, de Quelepa.

También 9.45 kilómetros más entre El Obrajuelo y el cantón Hato Nuevo, de San Miguel.

Además de 8.83 kilómetros de vía ubicados entre Hato Nuevo y el cantón El Papalón, siempre en San Miguel.

El baipás contará con cuatro intersecciones, tipo redondel, en Quelepa.

También habrá intersecciones en Hato Nuevo y El Papalón, con la calle que conduce al cantón Agua Zarca, siempre en San Miguel.