Lejos de negar que el país se acerca a convertirse en un “Estado fallido” como lo advirtió ayer el Arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, el presidente Salvador Sánchez Cerén dijo “coincidir” con la postura de la Iglesia Católica sobre los niveles de criminalidad que abaten al país e indicó que pronto implementará sus planes de seguridad.
“Pronto estamos por lanzar el sistema de seguridad y convivencia ciudadana, lo vamos a desplegar poco a poco en los municipios, que es el despliegue de la policía comunitaria, despliegue de un sistema de inteligencia policial, de una mayor presencia de la Policía Nacional (Civil) y el trabajo directo con las comunidades, con la familia, con todos”, adelantó.
El mandatario tomó la palabra a la Iglesia Católica, sobre trabajar porque el país no colapse ante las estructuras delincuenciales.
“Yo escuché a monseñor Escobar Alas. Hay la posibilidad de un Estado fallido, pero tengamos fe, tengamos confianza en el pueblo y llamó al pueblo a trabajar por evitar que este país se hunda”, manifestó el mandatario.
Ante la insistencia de los medios de comunicación sobre las palabras del jerarca de la Iglesia Católica, Sánchez Cerén, aceptó la postura del prelado. “Coincido totalmente con la visión que la Iglesia, la Conferencia Episcopal ha planteado en este momento yo invito a todo el pueblo, aún a los medios de comunicación a que nos unamos a darle esperanza a este pueblo porque no se puede dejar vencer por el miedo, no se puede dejar vencer por las extorsiones, no se puede extorsionar al país y mi gobierno está comprometido a construir la paz”, externó el gobernante.
Lo importante, a criterio del jefe del Ejecutivo, es que ante esta ola de criminalidad, se necesita la unidad de todos los salvadoreños.