Sin resultados investigación por procedimiento policial contra El Faro

Ministro de Justicia afirmó que han identificado a los policías involucrados y que Inspectoría ha iniciado la investigación respectiva.

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El periódico digital El Faro denunció ante Fiscalía una serie de amenazas por su labor periodística.

Por Jaime López sucesos@eldiariodehoy.com

2014-07-30 8:00:00

A quince días de que un periodista del periódico digital El Faro fuera retenido por casi media hora por agentes del 911 y de la División Antinarcóticos (DAN) en Santa Ana, el Ministerio de Justicia y Seguridad, aún no tiene resultados de la investigación interna.

El ministro de Justicia, Benito Lara, afirmó ayer que ya tienen individualizados a los policías que habrían retenido, sin aparente razón, al periodista Óscar Martínez y a su hermano.

Ambos fueron obligados a bajarse del vehículo en el que regresaban de entrevistar a una de sus fuentes el pasado 16 de julio.

“Hemos ubicado quienes son los policías y la Inspectoría General tiene un proceso abierto para investigar cuál es la veracidad de las distintas opiniones que han habido al respecto”, puntualizó Lara.

Agregó que cuando la Inspectoría tenga resultados de la investigación, los darán a conocer, pues ya hay un proceso abierto.

Según el periodista, cerca del kilómetro 70 de la carretera que de San Salvador comunica con Ahuachapán había un retén policial, que luego de identificar el vehículo en el que viajaban, inició una persecución con luces de emergencia activadas.

Pocos metros después, los agentes le ordenaron al periodista y a su acompañante que se detuvieran.

Cuando el comunicador y su hermano se bajaron, del monte salieron dos agentes antinarcóticos, enmascarados y les ordenaron que se quitaran las camisas para supuestamente verificar si tenían tatuajes en el cuerpo.

Al no encontrarles ningún tatuaje alusivo a pandillas, los interrogaron de forma intimidatoria. Preguntan al comunicador si de entrevistar a un sujeto que identificaron solo por el apodo venían, además buscaban asegurarse de si él había escrito dos reportajes sobre el Cártel de Texis.

Los policías dijeron al periodista que, por orden de “jefes de arriba”, tenían la indicación de retenerlos y no tenían derecho a hacer una llamada.