Miembros del Servicio Social Pasionista y representantes de diferentes organizaciones se hicieron presentes en la Dirección de Investigaciones de la PNC (DCI) para pedir que se libere al padre Antonio Rodríguez López.
Con carteles en mano, manifestantes, algunos habitantes de Mejicanos, piden a los automovilistas de la zona que los apoyen tocando la bocina de sus vehículos.
Los protestantes alegan que el religioso es inocente de lo que se le señala y que solo ayuda a la comunidad.
El sacerdote fue detenido el martes 30 de julio, acusado de tener vínculos con las pandillas y de haber introducido armas al penal de Izalco.
En el mismo operativo, la Fiscalía giró órdenes de captura contra pandilleros y empleados judiciales.