Mientras el ministro de Educación, Carlos Mauricio Canjura, confirmó que la semana anterior recibieron los lineamientos del Ministerio de Hacienda para preparar la propuesta de presupuesto de esa cartera de Estado, el viceministro del ramo, Francisco Castaneda, reconoció que sí requieren un aumento de fondos para el próximo año.
“Cada dirección (al interior del Ministerio de Educación) está planteando sus apuestas, sus requerimientos y consideramos que sí es necesario”, señaló Castaneda.
No obstante, el funcionario aclaró que en este momento no tienen definido cuánto podrían requerir y si esto es por arriba de los $878 millones de dólares que se le asignaron para este año.
“Si bien es cierto el Ministerio de Educación es uno de los que tienen mayor presupuesto, en relación a la demanda nacional y la inversión estratégica que se debe hacer en educación, sigue siendo insuficiente y consideramos que a más tardar iniciada la segunda semana de agosto vamos a tener cuantificada la propuesta de presupuesto”, citó.
El ministro Canjura, por su parte, sostuvo que “vamos a tratar de darle respuesta a todos los propósitos que tenemos para afectar positivamente el sistema educativo”.
Sin embargo, las comunidades educativas van más allá y piden que el interés y buena voluntad expresada por los funcionarios se traduzcan en recursos en las escuelas.
Y es que a estas fechas en el seno de muchos centros de enseñanza públicos aún esperan que les entreguen el presupuesto para funcionamiento y el dinero para pagar a proveedores.
Al consultar al viceministro Castaneda sobre estos temas expresó que el ministerio de Hacienda ha sido receptivo y les ha ido desembolsando de forma escalonada. “A estas alturas hemos sobrepasado ya el 70 por ciento de pago a proveedores de los programas sociales que desarrolla el ministerio de Educación, como es alimento escolar, los paquetes escolares, los uniformes”.
Aseguró que ya están haciendo transferencias de dinero a los centros y argumentó que a algunos aún no les desembolsan porque tienen pendientes liquidaciones de fondos de años anteriores.