“Me atropellaron en mis derechos constitucionales y el dictamen que emanó de la comisión decía que no había lugar a formación de causa”. Así reaccionó la legisladora arenera, Ana Vilma de Escobar, luego de que las bancadas de Gana y el FMLN aprobaran retirarle el fuero legislativo.
“Me siento atropellada como diputada, me siento atropellada como mujer, pero sobre todo, me siento atropellada como miembro de la fracción nacionalista”, señaló la legisladora, quien ya no podrá asistir a las comisiones del Congreso.
La legisladora dijo que continuará echando mano de su defensa ante los delitos de difamación y calumnia que le ha imputado el expresidente Mauricio Funes.
Es más, el abogado de la legisladora, Lisandro Quintanilla, dijo ayer en un programa televisivo que llamarán a la esposa del exmandatario, Vanda Pignato, para que explique cómo fue su quebradura de cadera, además de llamar a médicos que atendieron a Funes cuando aseguró que había sufrido el accidente en su residencia.
Asimismo, dijo que presentarán una demanda de amparo “para que se conozcan todas estas violaciones en la comisión de antejuicio”.
De Escobar aseguró que los hechos que ella señaló en contra del exmandatario no fueron difamación, sino que solo pidió a la Fiscalía que investigara el accidente del Ferrari en el redondel Masferrer, en febrero pasado.
“Yo lo que hice fue ir a la Fiscalía a dar una aviso. La comisión (de antejuicio) nunca pudo determinar que yo le atribuí al expresidente la comisión de un delito”, insistió.
Agregó que no tienen nada en contra del expresidente, pero no adelantó si está dispuesta a conciliar con Funes en los tribunales. De hecho, si el caso se alarga, incluso podrían estar en riesgo las intenciones de la tricolor de reelegirse como diputada.
De Escobar anunció que las diputadas de ARENA se retirarán del Grupo Parlamentario de Mujeres del Congreso, y que el FMLN perdió la oportunidad de establecer un diálogo con su partido.