SANTA ANA. El Ministerio de Obras Públicas (MOP) y la alcaldía santaneca ya no instalarán cerca de 300 metros de tubería en la calle El Chupadero para mitigar el riesgo de la zona generada por la cantidad de agua que corre en el sitio, debido a que parte de esta ha sido dañada por las constantes lluvias de las últimas semanas.
No es la primera vez que el invierno causa retrasos en dichos trabajos, que comenzaron el 26 de febrero pasado.
A los dos meses de haberse comenzado, una lluvia generó que el área que habían compactado con tierra, se lavara.
La semana pasada varios metros de tubería que ya estaban instalados fueron arrastrados y con la lluvia del lunes, parte de un paredón cercano al área de trabajo cedió.
Esto último provocó que se cayera una casa de lámina que estaba a la orilla. En ella habitaban cinco personas, entre ellos dos menores de edad.
William Escobar, del MOP, explicó que 25 metros de tubería que habían colocado han colapsado con las últimas lluvias.
Por ello, mejor optaron por construir una canaleta abierta de mampostería que permitirá recolectar el agua que corre por la calle y que, se supone, será más resistente a las inclemencias del tiempo.
“Por la misma situación que se ha dado (daños por las lluvias), hemos cambiado de alternativa. La canaleta lo que permite es agarrar más caudal de agua”, manifestó Escobar.
Inicialmente los trabajos estaban previsto para tres meses. Por los daños debido a las lluvias podrían extenderse otros tres meses si estas no generan nuevos retrasos.
Agregó por el momento no han contemplado paralizar las obras mientras termina el invierno.
La inversión del proyecto será modificada, aunque Escobar no especificó de cuánto será el incremento. Lo que sí dijo es que en un inicio tenían previsto una ejecución que rondaba los $345 mil.
Los daños
María Contreras residía en la casa que cedió el lunes pasado a las 7:30 de la mañana, luego que parte del área donde se encontraba cediera.
Expresó que adentro de esta se encontraba un hijo que afortunadamente resultó sin lesiones luego que algunas láminas le cayeron encima.
La fémina razonó que lo mejor era realizar los trabajos en el verano pues con el movimiento de las maquinarias y la cantidad de agua que pasa en el sitio, está haciendo más sensibles los paredones.
“Si ellos hubieran trabajado desde cuando empezamos a hacer el llamado, al finalizar el invierno pasado, el peligro, ya hubieran terminado y hubiera quedado mejor”, dijo la fémina, quien también pidió ayuda para construir de nuevo su casa de lámina.
El jefe de Protección Civil en Santa Ana, Daniel Lemus, expresó que una persona que reside en la orilla de la calle El Chupadero fue evacuada a inicio de semana.
“La alcaldía les va a dotar de algún recurso para levantar una casa provisional porque aquí (zona afectada), ya no va a ser posible que esté debido a que sigue teniendo riesgo porque se está desprendiendo bastante material rocoso”, manifestó.