SAN MIGUEL. Las autoridades del Hospital Nacional San Juan de Dios, en San Miguel, dieron a conocer días atrás el trabajo que realizaron durante los cinco años de la administración del gobierno de Mauricio Funes, cuya administración finalizó ayer.
Informaron a detalle sobre los logros que alcanzaron mejorando la infraestructura y las áreas de salud dentro del nosocomio, y que en años anteriores no les habían prestado atención.
Manuel Pacheco, director del hospital argumentó que, han habido mejoras; pero están consientes que aún hace falta mucho más por hacer, teniendo en cuenta que el San Juan de Dios es el único hospital de referencia en el oriente del país.
Son más de tres mil los usuarios que son atendidos a diario en ese centro por diferentes patologías, todos referidos de los siete hospitales periféricos y unidades de salud de los cuatro departamentos.
Una de las mejoras fue la reconstrucción, que duró más de tres años, y para lo que fue necesario invertir 30 millones de dólares porque las instalaciones sufrieron daños en los terremotos de enero y febrero de 2001.
Otra de las renovaciones, según Pacheco, fue la compra de un equipo de Tomografía Axial Computarizada (TAC).
A esto se sumó la puesta en marcha de dos programas de beneficio para las madres y recién nacidos, el banco de leche materna y mamá canguro, que en conjunto ya han mejorado la atención de miles de madres de familia y bebés prematuros.
Sin embargo, los usuarios y miembros del Sindicato de General de Trabajadores de Salud (Sigesal) afirmaron que no es cierto que haya una mejora en el nosocomio.
“He venido en tres ocasiones a pedir cita y no se puede por dos cosas: o hay una fila larga o no hay quien atienda”, dijo Maribel Sorto, quien necesitaba una cita para pasar consulta en el departamento de ginecología el próximo mes y la cual no le fue otorgada por esos problemas.
Pero Pacheco aseguró que saben que aún hace falta más por hacer, como mejorar las áreas de salud y que por el momento han hecho lo necesario para el beneficio de los pacientes.
Para esas tareas serán los encargados de administrar los próximos cinco años los que harán las mejoras que les queden pendientes.
Emérita Rivas, presidenta de Sigesal, dijo que el maltrato a los usuarios es algo que siempre ha existido y que no han podido mejorar las autoridades del hospital, a pesar de que en varias ocasiones les han externado por medio de quejas escritas la situación.
Agregó que las áreas que aún hace falta mejorar son lavandería, cocina, vigilancia, entre otras. “No podemos seguir en lo mismo es necesario que haya una mejora”, dijo.
El área de emergencias también fue restaurada hace unos años, pero no dan abasto con tantos pacientes.