Jornada violenta deja catorce muertos en varios departamentos

Ayer se registraron tres dobles homicidios, uno en Metapán, otro en Quezaltepeque y uno más en Mercedes Umaña

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José Manuel Salazar Castro de 26 años y Douglas Gamaliel Rivas Ortiz, de 24, fueron asesinados en San Francisco Guajoyo, Metapán. Foto EDH / CRISTIAN D??AZManuel Castro Salazar, uno de los dos asesinados ayer en la hacienda San Francisco Guajoyo, en Metapán de Santa Ana deja un niño de seis años en

Por Diana Escalante, Lucinda Quintanilla, Cristian Díaz, Jaime López sucesos@eldiariodehoy.com

2014-06-17 8:00:00

La jornada violenta de ayer registró al menos 14 homicidios, entre ellos tres dobles asesinatos; uno en Metapán Santa Ana, otro en Quezaltepeque, La Libertad y uno más, en Mercedes Umaña, Usulután.

En el primer caso fueron asesinados Manuel Castro Salazar, de 27 años, y Douglas Gamaliel Rivas Ortiz, de 24.

El hecho ocurrió en la hacienda San Francisco, en el kilómetro 95 de la carretera a Metapán, en Santa Ana.

Cada uno de los hombres, quienes habitaban en la zona de la frontera Anguiatú, presentaban una lesión de bala en la parte trasera de la cabeza, según el informe policial.

Uno de los familiares de Salazar, relató que entre las 8:00 y 8:30 de la noche del lunes, él recibió una llamada telefónica donde le indicaban que saliera.

Salazar salió sin decir quién llamó ni para dónde se dirigía. En algún lugar se habrían juntado con Rivas y ambos fueron llevados hacia la hacienda. A pesar de que Rivas residía en Metapán, el vehículo tenía placas guatemaltecas.

Según sus familiares, lo había comprado el año pasado, pero no había podido hacer los trámites para obtener las placas salvadoreñas.

Salazar, quien deja en la orfandad a un niño de seis años, se dedicaba a vender derivados de la leche y según sus familiares no tenía enemigos.

“No se metía con nadie y no tomaba, no tenía ningún vicio”, dijo un pariente.

Un allegado de Rivas explicó que como él no llegó la noche del lunes a su casa, fueron a la Policía de Metapán para interponer la denuncia.

Sin embargo, en la subdelegación les dijeron que estaban procesando una escena de doble homicidio. Al llegar, se percataron que era su familiar. Rivas deja un hijo de tres años.

Los vecinos del lugar del homicidio, aseguraron que escucharon varios disparos la noche anterior; sin embargo fue hasta ayer que se percataron de la presencia de las dos víctimas, que estaban fuera del vehículo.

Este es el segundo doble homicidio que se comete en Metapán en menos de 24 horas.

En lunes encontraron a una pareja de esposos en su casa en el barrio Las Flores, fueron degollados.

Quezaltepeque

En ese municipio, dos hermanos fueron ultimados en un mismo hecho cerca de las 11:00 de la mañana, afirmó la Policía.

Las víctimas fueron Manuel de Jesús Rivera de 40 años y Julio César Rivera, de 27. El hecho sucedió en momentos que los hermanos clasificaban desechos metálicos frente a su vivienda, situada al final del pasaje Lachín de la colonia Santa Emilia.

Según los vecinos, unos sujetos llegaron al lugar y luego escucharon las detonaciones, de inmediato murió Julio César, mientras Manuel de Jesús fue trasladado a la unidad de Salud de Quezaltepeque, donde murió, poco después.

La Policía de Quezaltepeque se mostró hermética en brindar información. La colonia Santa Emilia ha sido escenario de al menos siete homicidios este año.

El tercer doble homicidio se registró ayer por la tarde en el municipio de Mercedes Umaña, en Usulután.

Las víctimas fueron identificadas como Pedro Santiago Morales de 58 años y José Julio Morales de 40, quienes fueron asesinados la tarde de ayer en la colonia Las Flores del cantón Santa Anita.

Los hombres fueron atacados en una cervecería cuyo dueño era Morales. Por este doble crimen fue detenido José A. a quien le decomisaron tres armas de fuego: una escopeta y dos pistolas, además de un vehículo.

Al cierre de esta nota, las autoridades desconocían el móvil de este doble asesinato.

Violencia en zona oriental

La zona oriental fue golpeada ayer martes por varios casos de violencia. Al cierre de esta nota se reportaban nueve muertes, tres en San Miguel, cuatro en Usulután y dos en La Unión.

En uno de los casos, un hombre fue atacado a balazos en el cantón Teponguaste de Ciudad Barrios.

Más tarde, la Fiscalía informó del hallazgo de dos cadáveres, en sitios distintos del municipio de Pasaquina, La Unión. El Ministerio Público indicó que los cadáveres ya estaban en proceso de descomposición.

Uno fue localizado en el cantón Piedras Blancas, Pasaquina y otro en cantón Cofradía Nueva, Yayantique.

Siempre en el oriente del país, fue localizado otro cadáver semienterrado en las instalaciones del Instituto Tecnológico de Usulután, había desaparecido el día de ayer.

En Ciudad Barrios, San Miguel también fue acribillado Noé de la Cruz Rodríguez Castro, de 30 años.

En otro hecho, el Ministerio Público informó que en la hacienda San Isidro, del cantón Las Placitas, siempre en San Miguel, fue ultimado Jorge Cruz Crespo, de 32 años.

El hombre tenía un tatuaje de la mara 18 y fue asesinado por varios sujetos que llegaron a sacarlo por la fuerza a su vivienda.

Además, Elmer M., de 17 años, fue asesinado en el cantón La Montaña del San Agustín, Usulután.

El adolescente, quien presuntamente era de la pandilla 18, fue atacado a balazos por mareros rivales.

Hombre calcinado en San Miguel

Los familiares de Pedro Antonio Zetino Ventura, de 58 años, lo vieron con vida por última vez la tarde del lunes, cuando salió en su pick up rumbo a una cena en el caserío El Tular, del cantón Las Delicias, en San Miguel.

Zetino Ventura, residente del cantón La Trinidad, cercano a Las Delicias, no regresó al hogar y fue hasta ayer por la madrugada, cuando fue encontrado muerto y quemado sobre la cama de su vehículo.

A excepción de una parte del rostro, el cadáver estaba completamente abrasado, informó Óscar Meléndez, jefe de la Unidad de Vida de la Fiscalía.

Los familiares de Zetino pudieron reconocerlo al ver el área de la cara, que no fue alcanzada por el fuego.

Las autoridades señalaron que la escena del asesinato era confusa pues el pick up de la víctima, placas P 488234, también estaba quemado, principalmente de la parte de adelante. “La parte más quemada del carro es la cabina, no se sabe si es que en la parte trasera, solo incendiaron el cuerpo”, dijo Meléndez.

Durante la inspección del cadáver, los forenses no lograron determinar si los homicidas mataron a Pedro Antonio antes de quemarlo o si le pusieron fuego, cuando aún estaba con vida.

Se presume que el asesinato fue cometido a la 1:00 de la madrugada, pues los parientes de Zetino relataron que como a esa hora, escucharon una explosión. Los dolientes dijeron que el hombre no se vinculaba con estos grupos y tampoco había recibido amenazas de muerte.