Los peligros que representa el volcán Chaparrastique por el riesgo de hacer una nueva erupción no logra romper la calma con la que los migueleños desarrollan sus actividades diarias.
En los últimos días la expulsión de cenizas y emanación de gases ha incrementado considerablemente; sin embargo, se puede apreciar a los habitantes de San Miguel y otros municipios próximos al coloso, no inmutarse ante el peligro que presenta.
Incluso, el pasado sábado Protección Civil previó realizar evacuaciones ante el incremento de las vibraciones internas, las cuales han fluctuado de entre 973 y 602 unidades RSAM (Amplitud Sísmica en Tiempo Real, por sus siglas en inglés).
En el centro de la ciudad migueleña, el tránsito de vehículos y el desplazamiento de peatones se hace con normalidad y hasta pueden observar a lo lejos la expulsión de cenizas que hace el Chaparrastique. El material ha caído en la finca La Piedrita, La Piedra y finca Lacayo, es decir, de 3 a 5 kilómetros al noreste del cráter
De acuerdo con el último informe de monitoreo del Ministerio del Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), la vibración interna del coloso supera los valores previamente alcanzados antes de la erupción del 29 de diciembre de 2013.
El incremento de la actividad volcánica indica una gran inestabilidad y la posibilidad de una actividad eruptiva de mayores proporciones pero, aún así, los pobladores no se les inmuta el riesgo en el que se encuentran.