Finaliza restauración en el templo católico de Atiquizaya

b La inversión realizada en los trabajos asciende a $52,422.20

descripción de la imagen
Los trabajos están valorados en $52,422.20 dólares. Foto EDH / Roberto Zambrano

Por Roberto Zambrano comunidades@eldiariodehoy.com

2014-04-03 7:00:00

AHUACHAPÁN. Los trabajos de restauración de la iglesia parroquial Inmaculada Concepción de María, en Atiquizaya, culminaron para satisfacción de autoridades religiosas y fieles católicas.

El templo católico quedó semi destruido en su parte frontal, en el año 2001, por los terremotos que azotaron al país.

Dos meses después del fenómeno natural, se prohibió el ingreso de la gente por la puerta principal, porque representaba un serio riesgo.

Fue así como la entrada de los fieles se hizo desde entonces por las puertas laterales.

Para poder realizar los trabajos, los católicos acudieron a la municipalidad, presidida por Ana Luisa Rodríguez de González, quien aportó cerca de $37, 422.20 para las obras.

Mientras que la iglesia puso una contrapartida de unos 15 mil dólares.

Los trabajos comenzaron en septiembre de 2013 y recién finalizaron el mes pasado.

Lo realizado consistió en la restauración principalmente de la fachada, que era el área que presentaba mayores daños. Había grietas y fisuras causadas por los terremotos.

Pero además de los sismos, el deterioro también fue provocado porque en la parte más alta, hay dos pilas que mantenían la humedad en dicha área.

Con el tiempo, el agua comenzó a filtrarse, lo que generó debilidad a la infraestructura, que data de 1899.

Por su antigüedad este templo es considerado como un Bien Cultural.

La Secretaría de Cultura (Secultura) aprobó los trabajos de restauración que se hicieron, a través de una resolución emitida el 24 de mayo del año 2013.

Dicha orden dejó sin efecto otra que había sido emitida el 23 de enero de ese mismo año, debido a algunos cambios que se realizaron en la carpeta técnica inicial.

De hecho, una de esas modificaciones fue que la inscripción del año que se muestra en la fachada de la iglesia pasó a su lugar original, que es unos centímetros más abajo de donde se encontraba antes de ser intervenida.

En el espacio que dejó el número, fue colocada la imagen de la Virgen.

Además, se realizó la demolición de las pilas.

Los católicos están emocionados con las obras, sobre todo porque aseguraron que las actividades de Semana Santa tendrán un mayor realce que años anteriores.

Ello, debido a que las imágenes podrán salir por la puerta principal del templo.

El párroco del templo, presbítero Francisco Baños, también agradeció el apoyo que recibió de la municipalidad y el esfuerzo que realizó la feligresía al participar activamente de cada una de las actividades que tenían como fin principal recaudar fondos para culminar los trabajos.