Obras del Goes causan daños colaterales en vías municipales

En Soyapango, Ilopango y Apopa, el desvío de rutas ha arruinado varias arterias

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La calle principal de la colonia Vista al Lago está deteriorada por la carga vehicular que se ha desviado hacia ella. Foto edh / René Quintanilla

Por Nidia Hernández comunidades@eldiariodehoy.com

2014-04-27 7:00:00

Los alcaldes de Ilopango, Soyapango y Apopa tienen serios reclamos hacia las autoridades del Ministerio de Obras Públicas (MOP), ya que la implementación de sus grandes proyectos, como el Sitramss y el cambio de carpeta asfáltica en diversas vías Fovial, les ha arruinado las calles de sus municipios.

Particularmente en Ilopango y Apopa, las alcaldías han tenido que invertir miles de dólares para reparar las vías que se están usando como alternativas para el transporte público y privado.

El MOP y el Fovial han tenido que recurrir a algunas arterias como opciones de rutas para evitar la circulación lenta por las obras; pero no valoran las condiciones de las vías. Muchas de estas ya estaban en mal estado y con el exceso de carga vehicular se han llenado de agujeros y se han convertido en una pésima alternativa para transitar.

Solo en Ilopango, al oriente de San Salvador, la comuna ha reparado seis calles por la desviación de rutas y por los trabajos paralelos al Sitramss, estos incluyen el recarpeteo que hace el Fovial en las cercanías de Cárcel de Mujeres y el bulevar San Bartolo.

El edil de Ilopango, Salvador Ruano, enfatizó en que es una inversión “onerosa” la que han realizado para el mejoramiento de las vías por “culpa” del Sitramss. Tanto así que solo en la calle Primavera desembolsaron 280 mil dólares.

En otro paso de la comunidad Banco Hipotecario gastaron 175 mil dólares.

Ruano señaló que el Sitramss solo les ha servido para “generar caos; aquí abren y cierran y distorsionan todo el tráfico. No sabemos cuál es la gran prisa de ese gobierno por gastarse ese dinerito. Habría que investigar si están haciendo las cosas en orden o no”, insistió.

Desde que inició el proyecto, la circulación vial en el municipio se ha visto afectada y, a la fecha, no le ha “beneficiado en nada”, al contrario “el desorden” le ha generado altos gastos, aseguró.

La calle de la colonia Vista al Lago es una de las más deterioradas, solo en ella invirtieron $38, 650.

También en Soyapango la situación se asemeja, solo que la alcaldía aún no ha reparado arteria alguna.

La calle Buena Vista, que está paralela a la avenida El Rosario, donde se construye la terminal de los buses del Sitramss, es la que se ha llevado la peor parte, ya que no ha resistido la carga de los camiones que transportan material pesado.

El edil, Jaime Lindo, confía en que “las autoridades correspondientes” correrán con los gastos de reparación de la avenida y pide que “inspeccionen” la zona.

Lindo reconoce que tienen ciertas limitantes para solucionar los inconvenientes viales y señaló que trabajan “progresivamente con un presupuesto predeterminado anual y no alcanzamos a llegar a tantas calles y a tantas necesidades que tiene el municipio”.

Otras arterias deterioradas por la carga vehicular son la 2a. Calle Oriente, calles Antigua a Tonacatepeque y Roosevelt; y un tramo de la calle Agua Caliente.

Los daños en Apopa

El pasado 31 de marzo Fovial abrió el paso completo en la carretera Troncal del Norte, luego de casi cuatro meses de restricciones; pero la apertura dejó a su paso una serie de desarreglos en las calles del centro urbano de Apopa.

Según el alcalde Elías Hernández, el cierre del carril que conduce hacia el norte del país, desde el paso a desnivel con la autopista Este -Oeste y que termina al llegar al puente del río Acelhuate, obligó a los conductores a transitar por vías alternativas de esta ciudad.

A raíz de eso, cerca de ocho pasos vehiculares se han dañado severamente porque no estaban diseñados para que transitara tanto tráfico de automotores.

Entre ellos está la 4a. Calle Poniente, a la altura del cementerio; los accesos al casco urbano, calle la Estación y la antigua vía hacia la Troncal del Norte, que ya han pasado la factura a esta comuna.

El panorama es el mismo en la prolongación de la 4a. Calle Poniente y a las urbanizaciones Jardines del Norte I y II.

Solo en el casco urbano, el jefe edilicio estimó una inversión que ronda los 210 mil dólares para repararlas.

“Muchas de estas arterias son de adoquines y el alto impacto vehicular lo ha levantado a tal grado de volverlas intransitables”, se quejó Hernández.

Asimismo, no dudó en afirmar que la falta de planificación e improvisación por parte de las autoridades del MOP les ha heredado un problema que ya estaba resuelto.

“Meses atrás, la comuna inició un plan de mantenimiento de las calles del municipio, pero en dos meses la red vial interna ha colapsado en su totalidad”, aseguró.

La municipalidad deja toda la responsabilidad al (MOP) y a la empresa responsable de ejecutar las obras, a quienes por medio de una carta le solicitan su reparación.

Pero lo grave del asunto, retoma Hernández, es que la empresa que contrató Fovial les dejo en pésimo estado el arriate central de la carretera, en el que han invertido casi los $475 mil . “Es grave porque firmamos un convenio con Astaldi y hasta la fecha no ha pasado nada. Ellos se iban a hacer responsable de los daños colaterales que hubieran en el municipio”, explicó Hernández.

Añadió que la comuna se vio obligada a reorientar fondos propios para palear el inconveniente en las calles averiadas; pero espera que el problema en el arriate lo solucione la constructora o Fovial.

Más reclamos

Quizá algunos están cansados de leer y escuchar sobre tráfico lento, calles congestionadas y un sin fin de problemas relacionados a los embotellamientos viales; pero para los que transitan en el centro de Ilopango y Soyapango es un dolor de cabeza.

Los ediles lo reconocen. Ruano lo califica como una “tontera” porque ha afectado la economía de las familias y que el Sitramss los ha hecho “sin planificar”.

Ruano insiste que el caos generado en el municipio “tiene de rodillas a los habitantes, ya son casi ocho meses o más de estar en el desorden”.

Asimismo, el caos vial se ha trasladado al casco urbano de Soyapango. “En horas pico el municipio se vuelve intransitable y pasar de un lado a otro es una osadía”, afirmó Lindo.

Los automovilistas también se quejan de la problemática. Gustavo Cruz cuenta que antes del Sitramss viajaba de Soyapango a San Salvador en 25 minutos, “hoy me tomó de una hora a dos. El centro de Soyapango es, de verdad, un caos completo”, reiteró.

Tantos los ediles como la población esperan que las obras finalicen a la brevedad posible y que algunas de las vías aún dañadas sean reparadas.