Santanecos exigen reparar vía dañada por Anda

Hay casas que ya muestran daños. Vecinos pro su cuenta efectuaron reparaciones en la vía, pero se dañó de nuevo.

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Pobladores han colocado un letrero en el que reclaman que la autónoma no da la atención debida al problema. Anda aseguró que ayer realizarían inspección. Foto EDH / Iris Lima

Por Iris Lima comunidades@eldiariodehoy.com

2014-04-01 7:00:00

SANTA ANA. Habitantes de la colonia 5 de noviembre en Santa Ana protestaron ayer de una manera muy peculiar contra la Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (Anda), por el mal estado en que esta dejó la calle hace cinco meses, cuando introdujo una tubería de agua en la zona.

En dos tablas de madera pintaron el siguiente mensaje: “A Anda no le importa ni el daño a nuestras viviendas y menos la suspensión de tu auto”.

Jan Soto, el creador del mensaje, explicó que optó por colocar dicho rótulo para ver si así las autoridades de la autónoma les prestan atención.

Soto aseguró que el problema data desde hace seis meses, cuando la Anda llegó, rompió la calle, colocó una tubería y dejó la zanja abierta.

Debido a que la vibración de la calle por el paso de los vehículos, en diciembre del año pasado, los afectados reunieron dinero para comprar cemento, arena y grava para reparar el tramo dañado.

Sin embargo, la reparación sólo les duró tres meses; pues, el paso constante de automotores volvió a dañar la vía.

Consideran que ellos no pueden estar reparando una calle que una entidad estatal dañó. “No nos corresponde hacer ese gasto. Lo hicimos una vez por la misma necesidad; pero, ya no podemos estar sacando dinero de nuestro bolsillo para eso”, dijo Soto.

Manifestó que ya buscaron ayuda en la autónoma, pero no fueron escuchados.

“Ya fuimos a Anda y nos remitieron a Fovial (Fondo de Conservación Vial). En Fovial nos dijeron que le correspondía al MOP (Ministerio de Obras Públicas); y en el MOP nos volvieron a remitir a Anda. Es una rueda de caballitos ridícula”, dijo Soto.

La preocupación es que el invierno está próximo y consideran que el problema puede empeorar; pues, la vibración de la calle se siente hasta sus hogares, donde las paredes ya han comenzado a agrietarse. “Cuando se caiga una pared, nadie nos va a responder”, dijo Norma Guerra.

En su vivienda, algunas paredes ya se despegaron de las columnas. Ello, pese a que la construcción es nueva y de bloques de cemento.

Se buscó la versión de la Anda, que aseguró que ayer enviarían a una cuadrilla de trabajadores para tomar las medidas del daño ocasionado.