Después de haber transcurrido la primera vuelta de las elecciones presidenciales, el 2 de febrero pasado, los índices de homicidios han tenido un incremento significativo y, sobre todo, durante los fines de semana, según registros de la Policía.
Las cifras policiales detallan que hasta el 26 de febrero iban 93 asesinatos más que en el mismo período del año pasado, en el que los crímenes sumaron 369.
En los dos primeros meses de este año, la Policía registró 472 asesinatos.
Lo anterior refleja que, en promedio, ocho salvadoreños mueren por día a raíz de la violencia criminal en el país.
El tercer fin de semana de febrero se convirtió en el más violento de este año, cuando la Fiscalía y el Instituto de Medicina Legal reportó 47 muertes violentas durante el 14, 15, 16 y las primeras ocho horas del 17 de febrero.
Las autoridades policiales también reconocieron que solo el domingo 16 de febrero fueron cometidos 30 homicidios, siendo el segundo día más violento desde el fin del conflicto armado en el país, en enero de 1992.
En el segundo fin de semana de febrero, en las fechas 8 y 9, las autoridades registraron 21 muertes violentas, 10 más con relación a las mismas fechas del año pasado.
Otro repunte de homicidios se produjo el fin de semana del 22 y 23 de febrero, durante el cual se contaron 24 muertes violentas, la mayoría de las cuales fueron perpetradas en la zona Oriental del país y específicamente en Usulután.
Las autoridades fiscales y policiales aseguraron que las causas del incremento de los asesinatos en el departamento de Usulután se debieron a las purgas internas en la mara 18 y al aumento de los ataques entre las dos principales pandillas del país, rivales entre sí.