SANTA ANA. La Fundación Ambientalista de Santa Ana (Fundasan), que administra el parque San Lorenzo, no cuenta con los $81,853 que requiere para mejorar el área administrativa y el hábitat para la conservación de las especies que alberga.
Así lo reconoció la presidenta de la fundación, Carmen Martínez, luego que un estudiante de la Universidad Católica de El Salvador (Unicaes), Martín Solano, le presentó los resultados de una investigación que realizó en el parque.
Martínez dijo que los gastos del lugar apenas son cubiertos con el pago de $2 que hacen las personas por ingresar, a excepción de los estudiantes que llegan de escuelas rurales que entran gratis.
Por ello no han podido construir y equipar una clínica de atención para los animales, un cuarto frío para la conservación y manipulación de los alimentos, y una área de cuarentena para aves y mamíferos, tal como lo plantea el documento.
También expone la necesidad de mejorar el área administrativa con la construcción de una sala de espera, recepción, taquilla, oficinas de personal y servicios sanitarios, lo que supone la inversión de los casi $82 mil.
Pero no es la única necesidad que enfrenta el parque.
Para la fundación, la necesidad más apremiante es la mejora de los recintos en los que se encuentran más de 150 especies animales que poseen el recinto.
La presidenta de Fundasan manifestó que el mal estado en el que se encuentran estos espacios se vuelve un problema, principalmente en temporadas lluviosas por las filtraciones que enfrentan.
La propuesta de diseño hecha en el documento consiste en la construcción de recintos con un área de 35 metros cúbicos, con espacios de antesala, área de manejo, dormitorio, bodega, el hábitat de acuerdo con la especie, así como un anexo.
El costo de cada recinto ascendería a 21,564.47 dólares. La fundación tampoco cuentan con ese dinero.
El parque tiene actualmente 20 recintos, de los cuales solamente uno cuenta con una estructura de tubos industriales, malla ciclón y techo de lámina.
Los demás están construidos de madera y lámina.
Martínez reconoció que desde que administran el parque, en 2001, han padecido de serios problemas económicos para impulsar proyectos como el planteado por el universitario.
A penas, a finales del año pasado, la Asamblea Legislativa les aprobó 15 mil dólares que servirán para el mantenimiento durante 2014.
Sin embargo, ese dinero y lo que perciben por las 900 personas que llegan cada mes, en promedio, no será suficiente para cubrir todas las necesidades que tiene la infraestructura y los animales.
Entre ellas destacan la compra de medicamentos, vitaminas, alimentación y mantenimiento de los recintos.
Además de pago de personal y de servicios básicos.
Martínez llamó a los políticos y empresa privada para que colaboren con el parque que cuenta con una extensión de 95 manzanas.
También lamentó la falta de colaboración por parte de la alcaldía y el gobierno, a través del Ministerio de Medio Ambiente.
El documento
El autor del documento donde se exponen algunas necesidades y lo que se debe de realizar, expresó que estudia arquitectura en la Unicaes.
El trabajo lo realizó en un año y reconoció que no fue un trabajo fácil debido a la poca experiencia que tiene con los animales.
Sin embargo, dijo que mejorar las condiciones de las especies que alberga el parque se convirtió en un reto.
Él también llamó a las diferentes instituciones, públicas y privadas, a colaborar con la fundación santaneca con la financiación de obras.
Solano, además, ha marcado en su estudio espacios que permitirán proyectar la creación de nuevas áreas en un futuro, entre ellas un acuario y un recorrido académico.