Una bebé de nueve meses con signos de dengue falleció ayer por la mañana en el Hospital de Niños Benjamín Bloom. La infante ingresó el domingo con fiebre, piel roja y diarrea.
Debido a la gravedad con la que llegó fue internada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), residía en Mejicanos, San Salvador.
El martes la infante fue conectada a un ventilador mecánico para que le ayudara a respirar y también se le hizo diálisis.
El caso fue discutido ayer por los especialistas del centro médico. La prueba resultó positiva al virus. Pero todavía se esperan los resultados de los exámenes de laboratorio del Minsal.
Las autoridades del hospital no se pronunciaron sobre el caso. El martes se solicitó información sobre la condición de la bebé, pero personal de Relaciones Públicas informó que el epidemiólogo estará fuera del hospital toda la semana. Tras la muerte de la niña, se volvió a preguntar y se espera que hoy puedan atender la solicitud de entrevista.
La defunción de la infante ocurre en el momento en que el Ministerio de Salud (Minsal) registra un incremento de la enfermedad con relación al mismo periodo del año pasado y justo cuando la ministra, María Isabel Rodríguez ha apelado a la colaboración de la población para que el problema no aumente.
De enero al 8 de marzo, el Minsal reporta 1,266 casos confirmados de la infección; el año pasado, a la misma fecha, se notificaron 672, es decir, un 88 % más.
“No hay una epidemia verdaderamente, pero necesitamos cuidarnos mucho para que esto no se extienda”, comentó la funcionaria.
Solo en la última semana epidemiológica se notificaron 173 nuevos casos de la enfermedad.
Sonsonate, Cuscatlán, San Vicente y Santa Ana son los departamentos más afectados, según el Minsal.
Rodríguez reiteró que las condiciones no están dadas para declarar una alerta sanitaria. “No hay pacientes fallecidos; la epidemia está controlada, pero necesitamos envolver a la población porque ha habido un descuido”, acotó Rodríguez.
La ministra añadió que el cambio climático ha afectado y recordó que las lluvias intermitentes contribuyen a que haya criaderos de zancudo.
El mes pasado, las autoridades del Minsal giraron instrucciones al personal para cortar la cadena de transmisión de la enfermedad. Entre ellas, fortalecer la detección y la notificación de los casos y el manejo de los pacientes; hacer un análisis semanal del comportamiento de la enfermedad y activar los comités escolares contra el dengue.
A la fecha, en el país circulan los serotipos uno y tres.