Rezan el Santo Rosario en Plaza Salvador del Mundo

b Decenas de cristianos acudieron a la cita

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El fervor religioso era evidente en los feligreses.Decenas de cristianos acudieron a la cita espiritual organizada por el Comité de Oración por El Salvador. fotos edh /huber rosales

Por Ricardo Guevara comunidades@eldiariodehoy.com

2014-03-02 7:00:00

El Comité de Oración por El Salvador, realizó ayer el rezo del Santo Rosario para pedir por el cese de la violencia.

Decenas de cristianos se dieron cita a las 10:00 de la mañana en la Plaza de El Salvador de Mundo, bajo un ambiente de armonía, espiritualidad y devoción.

La iniciativa unió a todo el país en oración, ya que el evento fue transmitido a nivel nacional a través de Radio Luz y Ágape TV Canal 8.

La fiesta religiosa inició con la entonación de alabanzas, encendiendo el ánimo de los asistentes.

Luego empezó el momento más esperado para todos, el inicio del Santo Rosario.

Niños, jóvenes y adultos mayores, de diferentes parroquias participaron con solemnidad de la plegaria.

Al final de la ceremonia, se procedió a elevar un Rosario gigante al cielo, fabricado con globos de color blanco. Bajo aplausos, cánticos y bendiciones, estos ascendieron hasta desvanecerse en el horizonte.

Gioconda de Handal, del Comité de Oración por El Salvador, aseguró que se debe orar a la Virgen María para que interceda por todos nosotros, ante Cristo nuestro Señor.

La oración perfecta

El Santo Rosario es considerada la oración perfecta porque está unida al relato de nuestra salvación.

Ha sido asumida desde tiempos remotos por la Iglesia y por medio de su rezo los fieles tienen un momento de unión con Dios y la Virgen María, mediante la meditación de los acontecimientos más importantes de la vida de Jesús y de su madre.

La palabra Rosario significa “Corona de Rosas”. La historia detalla que María ha revelado que cada vez que rezan un Ave María le ofrecen una rosa y por cada Rosario completo le entregan una corona de rosas.

Con este acto cientos de salvadoreños se unieron de forma sublime y con mucha fe para pedir por el cese de la violencia que vive el país.

Esta actividad se realiza cada año en diferentes parroquias y lugares públicos.