La alianza entre productores de Azúcar y la Policía Rural en la zona costera del país, ha reducido la quema ilegal de cañales en un 20 por ciento, según lo afirmó ayer el subdirector de la Policía, Pablo Escobar Baños.
En la zona en mención, en la zafra anterior, más de 900 toneladas de azúcar se perdieron como resultado de la delincuencia y los descuidos.
Esas pérdidas significaron más de 14 millones de dólares, afirmó el comisionado Baños.
Aun con las nuevas medidas, las autoridades estiman que en lo que va de la cosecha, se han perdido entre 600 y 700 toneladas de azúcar.
Para la nueva estrategia de seguridad en la cosecha de este año, los productores aportaron 63 mil dólares, con los que se han comprado motocicletas, combustible, alimentación y incentivos a los policías que trabajan en el proyecto.
Más de 200 agentes de la Policía Rural han sido desplegados la zona costera para vigilar día y noche que la delincuencia no le prenda fuego a los cañales.
Además han reforzado la seguridad de los poblados aledaños evitando la presencia de pandillas y con ello, los asaltos y extorsiones a los conductores.