Más de 30 personas fueron evacuadas de volcán por gases

Las fuertes emanaciones obligaron a los residentes del caserío Las Piedritas a solicitar ayuda a Cruz Roja para salir

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Los socorristas acudieron al lugar luego de conocer la emergencia. foto edh / cortesía Cruz Roja

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2014-01-07 7:00:00

SAN MIGUEL. Al menos 31 personas que residen en los cantones migueleños El Conacastal, de Chinameca y Las Moritas, en San Jorge, ubicados en las faldas del volcán Chaparrastique, fueron evacuadas la noche del lunes por Cruz Roja.

Clemente Aparicio, alcalde de San Jorge, confirmó las evacuaciones y la intoxicación de tres menores de edad a consecuencia de los gases emanados del cráter del Chaparrastique. Aseguró que en el cantón Las Moritas, que es parte de la jurisdicción de San Jorge, la gente tuvo que salir por la emanación de gases que, según lo confirman los vulcanólogos del Ministerio de Medio Ambiente, eran dióxido de azufre.

Demetrio Escobar, vulcanólogo del MARN, aseguró que en caserío La Piedrita se investigó la supuesta existencia de una grieta que se habría formado tras la erupción del volcán; sin embargo, tras la verificación se comprobó que no existía fisura alguna.

Asimismo, aclaró que los gases provienen del cráter y los vientos se encargan de transportarlos a estas zonas.

Sobre el éxodo, autoridades edilicias de Chinameca aseguran que fue de carácter preventivo, dado que alrededor de las 7:00 de la noche del lunes, los habitantes de esas comunidades sintieron una fuerte emanación de gases. Ante ello, decidieron autoevacuar y dar aviso a las autoridades que, de inmediato, se movilizaron al lugar para apoyar el traslado.

Fredy Díaz, de Protección Civil Municipal de Chinameca, dijo que “la gente comenzó a sentir olor a veneno como a las 7:00 de la noche. El olor era tan fuerte que decidieron dejar sus casas y alertar a los demás vecinos”.

Agregó que luego de ello comenzó la evacuación.

Díaz confirmó que 12 familias fueron llevadas al albergue del Instituto Nacional de San Jorge y 19 más al refugio Maquilishuat, ubicado en el centro de la ciudad de Chinameca. Ya han comunicado al MARN lo sucedido para que haga la inspección y defina si la gente evacuada puede retornar a sus viviendas.

Entre los evacuados al albergue de Chinameca estaba Lilian Colato, quien asegura que el traslado de parte de las autoridades fue inmediato.

“Comenzamos a sentir fuerte olor a veneno y le dije a mi esposo que nos saliéramos. Les avisamos a las autoridades, llamamos al 911 y ellos nos refirieron a hablar con las autoridades de Chinameca, quienes nos dijeron que esperáramos una hora”, dijo.

Sin embargo, aclara que “yo le dije a mi esposo que no iba a esperar una hora, que en ese tiempo mi niño, que tiene meses de nacido, se me intoxicaría y buscamos ayuda hasta salir de la zona”.

Comentó que otras familias decidieron quedarse por temor a que les saquearan sus casas, pero que ellos están conscientes del peligro que representa estar en sus hogares aspirando azufre.

Patricia Chávez es otra de las que fueron evacuadas de la zona de La Piedrita, quien sostiene que “el mal olor nos generó deseo de vomitar, dolor de cabeza y cuando sentimos eso mejor nos salimos”.

Temor y necesidad

Los residentes en las zonas de riesgo por la erupción del Chaparrastique o deslaves del mismo durante el invierno, aseguran que saben el peligro que significa vivir a kilómetros del cráter, pero dicen no tener otra opción.

“Ya no queremos regresar a la casa, tenemos miedo de morir envenenados, pero no tenemos a dónde ir. Por mis hijos no quisiera regresar al volcán, pero no tengo opción”, dijo Colato.

Igual idea es la que tiene Patricia Chávez, pero tampoco tiene otra opción de vivienda.

Para estas familias la tranquilidad, según dijeron, nunca volverán a tenerla mientras residan en las cercanías del coloso, el único hogar que conocen.

Dicen que estarían dispuestas a cambiar de sitio de residencia si les dieran las alternativas, pero que eso lo ven lejano.

Ayer, EDH publicó que vulcanólogos del MARN recomiendan inhabilitar que haya ciudadanos residiendo en varios cantones y caseríos de las faldas del volcán; sin embargo, el Gobierno no tiene una alternativa en concreto para las familias que serían reubicadas y que, según Protección Civil, son 462.

El Gobierno dice tener más de 200 lotes que podría dar a las familias que sean reubicadas; empero, es un tema que aún está en discusión.