Por segundo día consecutivo, otro agente de la Policía Nacional Civil resultó herido de bala, ayer, tras haber sido atacado por varios pandilleros de la 18, en la colonia Altos del Escorial, en Mejicanos.
La víctima, quien está fuera de peligro, vestía de civil junto a otros tres compañeros, con quienes hacía una investigación en la zona.
Los agentes, según testigos, se movilizaban a bordo de un carro particular y fueron interceptados por los delincuentes cuando transitaban por el punto de la Ruta 33-B.
Tras lesionar al agente durante el enfrentamiento armado, los pandilleros lograron escapar.
Minutos después, otro grupo de agentes inició un operativo de búsqueda, terrestre y aéreo, en la colonia y en algunas lotificaciones del cantón Chancala.
Tras varias horas de búsqueda, las autoridades capturaron a siete personas sospechosas de haber participado en el ataque. Algunos pobladores lamentaron que las autoridades lleguen a la zona solo cuando hay hechos de violencia.
La tarde del lunes, otro miembro de la corporación policial fue herido de bala cuando participaba en un operativo que buscaba capturar a varios pandilleros que horas antes habrían asesinado en Concepción Batres, Usulután, a Gabriel González López, de 27 años, y lesionado de gravedad a su hijo, de 13.
Las autoridades lograron aprehender en el lugar conocido como Río Grande a tres mareros, quienes también salieron heridos. A ellos les decomisaron un arma tipo fusil.
Hasta ayer por la tarde se desconocía el motivo por los que padre e hijo fueron atacados por los pandilleros.
Matan a recolector de basura
Los hechos de violencia en Concepción Batres siguen imparables. Ayer otro hombre fue asesinado mientras trabajaba recolectando basura en la colonia El Progreso.
La víctima, quien supuestamente trabajaba para una empresa privada de limpieza, fue identificada como Gamaliel Antonio Perdomo Vázquez, de 26 años.
Días atrás, otros dos jóvenes que eran parientes entre sí fueron asesinados en el cantón San Ildefonso, del referido municipio.
Las víctimas fueron Carlos Alexander Gómez, de 24 años, y Nelson Ernesto Saravia Gómez, de 23, quienes residían en la colonia La Pradera, en San Miguel.
La Policía informó que los jóvenes llegaron a trabajar a un potrero y pandilleros de la 18 los mataron por sospechar que eran de la mara rival.